Mi semana al volante de un MINI
Probamos el MINI Countryman Híbrido Enchufable

Una periodista y un diseñador se sientan al volante del último MINI Countryman Híbrido Enchufable para descubrir las ventajas de la conducción eléctrica en ciudad, la seguridad en carretera, su diseño urbano y su amplio espacio para toda la familia.
Un hombre y una mujer. Una single y un padre de familia. Dos estilos de vida y un coche que compartir. Una periodista y un diseñador se ponen al volante del MINI Countryman Híbrido Enchufable durante semana para descubrir qué les puede ofrecer este coche híbrido enchufable en su día a día. De su experiencia nace este artículo. ¿Cómo se comporta en los interminables atascos de una gran ciudad? ¿Y para aparcar? ¿Qué diferencias hay entre la conducción eléctrica y la habitual? ¿Es amplio para viajar con toda la familia? ¿Responde bien en carretera ? ¿Merece la pena? ¿Tanto como para no querer darle llaves al otro para que lo pruebe?
Prado Campos, periodista
Incredulidad y escepticismo. Reconozco que estas eran las primeras sensaciones que tuve cuando me propusieron probar durante una semana las supuestas bondades del nuevo MINI Countryman Híbrido Enchufable. Nunca había conducido un coche eléctrico y no creía que iba a encontrar grandes diferencias a la hora de ponerme al voltante. Y esa es precisamente su mayor virtud. No te das cuenta de que llevas entre las manos un coche eléctrico en un primer momento. Sin embargo, es absolutamente silencioso, tiene mucha potencia para salir en las arrancadas y facilita una forma de conducción que, para mí, es idónea para circular por ciudad y, además, es cero emisiones. Pero, ¿realmente merecía la pena comprarse uno?
Estar una semana al volante de este MINI me ha demostrado que sí, sobre todo en ciudad. Este coche tiene una autonomía perfecta para los trayectos diarios al trabajo y a casa en su modo 100% eléctrico (de 41 Km), que se ve multiplicada en el modo híbrido hasta los 500 Km. A todo ello, se suman sus claras ventajas a la hora de aparcar: gracias al distintivo Cero Emisiones el único quebradero de cabeza es encontrar una plaza en el centro. No es tarea fácil, pero los tickets y si es azul o verde ya son cosa del pasado. Además, y en grandes ciudades como Madrid, hay que destacar mucho que este coche es perfecto para tener acceso libre a la nueva área de prioridad residencial Madrid Central y circular durante las restricciones de tráfico por contaminación. Además puedes recargarlo de forma fácil en cualquiera de los enchufes que plagan ciudades y las principales carreteras y, lo más cómodo, en casa. Todo ello, con el consiguiente ahorro en combustible y la conciencia de que estás poniendo tu granito de arena para acabar con esas densas boinas grises que taponan nuestras ciudades.
Me gusta mucho el modo eléctrico. No sólo porque es muy silencioso, que lo es, sino porque me sorprende su potencia en las arrancadas.... Y además, porque sabes que no estás contaminando. En una ciudad como Madrid, con tantas restricciones por los niveles de contaminación, es importante.
El resultado a la hora de hacer un viaje largo se define en dos palabras: libertad y diversión. Conducir mola. Sobre todo si, además, emparejas tú móvil y vas escuchando música y disfrutando de todas las novedades tecnológicas de las que dispone este MINI. Algo, que sumado a un diseño que siempre me había llamado la atención, consigue que sea el coche que quieres tener en la puerta del trabajo y de casa. Para presumir de coche, sí, pero especialmente para disfrutar conduciendo.

HÍBRIDO



Alessandro Marra, UXUI designer
¿Dónde voy yo con un MINI? Fue la pregunta que resonó en mi cabeza cuando me dijeron que tenía que probar durante una semana el nuevo MINI Countryman Híbrido Enchufable. No pensaba que era un coche muy práctico con dos niños, sus sillas, carritos y demás bultos que acumula una familia en cada desplazamiento. Y me equivoqué. La primera sensación al montarme en este coche fue la de sorpresa. Me sorprendió la amplitud del espacio tanto del habitáculo como del maletero (tiene hasta 1.390 litros de almacenamiento y un comodísimo sistema de apertura y cierre con manos libres), que incluso nos sirvió de improvisado cambiador para nuestro hijo de 13 meses en un viaje que hicimos a Cáceres.
De hecho, este viaje me lo planteaba inicialmente como algo de todo menos relajante. Ir a buscar a los niños a la guardería y al colegio, darles de merendar, meternos todos (y todos somos los cuatro e incontables maletas) en el coche. Sin embargo, la amplitud, la seguridad y el silencio a la hora de la conducción fueron un regalo y el estrés de una operación salida de un puente lluvioso se convirtió en un momento de tranquilidad y relax. Los niños dormían, nosotros pudimos charlar cómodamente como si estuviéramos en el sofá de casa y el trayecto nos dejó una sensación de confianza y tranquilidad.
“Babbo, qué suerte tienes. ¡Cuántos botones!”
“Babbo [papá en italiano], qué suerte tienes. ¡Cuántos botones!”. Parece que el diseño y la usabilidad impresionaban tanto a mi hijo de cinco años como a mí. La interfaz del panel de control del MINI Countryman Híbrido Enchufable no solo me pareció agradable sino que destaco sobremanera su usabilidad: sencilla, práctica e interactiva. Algo que redondea la experiencia junto a su diseño icónico. Tan reconocible que hasta mi sobrino de 6 años supo decirme que era un MINI al instante de verlo a pesar de estar ante este modelo mucho más grande. Por último, también es importante hablar de la conducción en modo eléctrico. Es inevitable sentir que estás haciendo las cosas bien, que no contaminas y esa conciencia sirve de ejemplo para tus hijos.