Luis Cortés, en concierto en Salamanca: «Mi música ha sido mi psicóloga y mi refugio»

Natural de Burjassot (Valencia), con el duende gitano y el calor de África en sus venas, Luis Cortés ha logrado mezclar el flamenco con el soul y el R&B de una forma única. El valenciano visita Salamanca el 21 de febrero para dar un concierto en el Enjoy! Multiusos. Su pasión por la música y su afán por descubrir nuevos sonidos lo han llevado a consolidarse como una de las voces más prometedoras del panorama musical. «No me gusta encasillarme en un solo estilo. Prefiero encerrarme en el estudio con los productores, experimentar y encontrar algo que me diferencie», asegura el artista.

Más allá del éxito y la fama, Luis tenía un objetivo muy personal: sacar a su madre de trabajar. «Mi madre ha dado todo por nosotros, se ha quitado parte de su juventud para criarnos, y yo tenía claro que quería darle la vida que se merece. Gracias a Dios, ya lo he conseguido», confiesa. Pero su ambición no termina ahí: «Ahora mis objetivos son seguir llenando el corazón de la gente, disfrutar de la música y mantenerme en giras. Lo más importante es que mi música siga llegando a la gente».

Tras haber colaborado con artistas como Keen Levy, Zaira y Demarco Flamenco, el artista ya trabaja en su próximo disco, un proyecto que promete sorprender. «Se vienen colaboraciones muy interesantes, y lo que puedo adelantar es que será un álbum con un Luis más maduro. Contará historias personales, hablará del amor y de mi forma de ver la vida», explica.

Sin embargo, reconoce que el proceso de selección de temas es complicado. «Cada canción es como un hijo, todas tienen una historia y un significado especial. A veces cuesta decidir cuáles incluir y cuáles no, pero forma parte del proceso creativo», comenta.

Uno de los temas más personales de Luis es 'Mi casa', una canción que aborda temas como la salud mental y la importancia de encontrar un refugio en momentos difíciles. «He tratado de liberarme. La música ha sido mi psicóloga. Necesitaba soltar lo que tenía en el pecho, plasmarlo en papel y convertirlo en canciones. Era una manera de evadirme de la realidad y encontrar un estado más zen, más buena vibra», explica.

En esta canción, el valenciano habla de su búsqueda de la felicidad, que encuentra en lo más simple: «Para mí, la felicidad está en mi familia. En hacer planes, en pasar tiempo con los niños, en jugar al fútbol… No necesito más. Claro que estaría bien irme a Punta Cana, pero lo que realmente me llena es estar con los míos».

Cortés no olvida de dónde viene ni el esfuerzo que le ha llevado hasta aquí. Si pudiera hablar con el niño de 10 años que soñaba con ser músico, le daría un consejo claro: «Que siga luchando, que no se decaiga. Siempre va a haber un sol después de la tormenta. Le diría que disfrute de la vida, que no tenga prisa por crecer y que siga siendo feliz».

El artista ofrecerá un concierto inolvidable en Salamanca, y anima a sus seguidores a no perdérselo. «Va a ser una noche muy especial. Vamos con un Luis al 100%, sin filtros ni miedos. Será un espectáculo lleno de emociones, de historias reales que van a tocar el corazón del público. Te prometo que lo vas a pasar increíble».

Luis sigue avanzando en su carrera con los pies en la tierra, consciente del poder de su música y de la conexión que ha logrado con su público. Con un nuevo disco en el horizonte y una gira en marcha, el artista tiene claro su propósito: seguir emocionando y dejando huella en cada canción.

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