Europa cuestiona la fusión de la Air Europa del salmantino Hidalgo con Iberia

El culebrón empresarial que ha supuesto la compra de Air Europa por parte de IAG está lejos de terminar. La operación que se cerró a finales del año pasado preocupa a la Comisión Europea, que ha anunciado este miércoles la apertura de una investigación «exhaustiva» sobre la fusión. Bruselas advierte de que tiene «reservas preliminares» ante la posibilidad de que esta operación disminuya la competencia en el transporte aéreo de pasajeros en varias rutas nacionales e internacionales, de corta distancia y de larga distancia.

La Comisión Europea observa que IAG y Air Europa son competidores potentes y cercanos y que su fusión podría afectar a la competencia en las rutas nacionales, sobre todo en aquellas en las que el tren de alta velocidad no es una alternativa y en las rutas entre España y las islas Baleares y Canarias. La operación también afectaría a las rutas de corta distancia que conectan Madrid con ciudades europeas y con Israel, Marruecos, Reino Unido y Suiza, para las que las dos compañías ofrecen trayectos directos. También preocupan las consecuencias en las rutas de larga distancia entre la capital española y América del Norte y del Sur.

«Deseamos asegurar que la operación no afecte negativamente a los precios o a la calidad de los servicios» dentro y fuera de España», ha señalado la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager. En su investigación, Bruselas tratará de determinar -entre otras cuestiones- si la amplia franja horaria que las dos compañías tienen en el aeropuerto de Madrid-Barajas dificulta o no la prestación de servicios de otras aerolíneas. La Comisión Europea tendrá hasta el 7 de junio de 2024 para adoptar una decisión definitiva.

Fuentes de Iberia han destacado que Bruselas ha señalado problemas en ciertas rutas «para los que aportaremos soluciones». La compañía ofrecerá una propuesta «muy ambiciosa» a la Comisión Europea, con la que aseguran que se cubrirán las necesidades de Competencia. Estas mismas fuentes afirman que están convencidos de que la operación «es buena para los consumidores y buena para España, ya que reforzará el hub de Madrid y fortalecerá la conectividad de nuestro país».