Borrar
Directo Una fuerte tormenta obliga a parar el partido en el Helmántico
Zona de la catedral de Ciudad Rodrigo que será intervenida. JCYL
Comienzan las obras de restauración de la catedral de Ciudad Rodrigo

Comienzan las obras de restauración de la catedral de Ciudad Rodrigo

Se procederá a la rehabilitación de las cubiertas y los paramentos de la sacristía y la antesacristía de la Seo mirobrigense

Salamancahoy

Miércoles, 19 de octubre 2022, 19:43

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Consejería de Cultura, Turismo y Deporte ha iniciado este miércoles, 19 de octubre, las obras de restauración de las cubiertas y la recuperación de los paramentos, las cresterías y los demás elementos ornamentales de esta zona de la Catedral de Ciudad Rodrigo, con una inversión de 430.557 euros que corre a cargo de los fondos de recuperación europeos y que se correspondería con la VIII fase de la restauración del edificio conforme al Plan Director encargado por la Junta de Castilla y León.

La obra, que tiene prevista una duración de seis meses, también prevé que se eliminen los añadidos del interior de la sacristía y antesacristía con el objetivo de recuperar el espacio situado sobre las bóvedas de la capilla del Evangelio.

La Catedral de Ciudad Rodrigo

La Catedral de Santa María de Ciudad Rodrigo fue declarada Monumento Nacional en 1889 y, desde 1985, tras la entrada en vigor de la Ley de Patrimonio Histórico Español, es Bien de Interés Cultural.

La construcción de este templo debió iniciarse en los años finales del reinado de Fernando II de León (1157-1188) o en los primeros de su sucesor, su hijo Alfonso IX de León (1189-1230), quizás el principal y primer gran impulsor de la obra. Comenzada siguiendo un proyecto tardorrománico, que aún conserva en buena medida en su perímetro exterior a pesar de las modificaciones posteriores (antesacristía, capilla mayor, capilla del Pilar y sacristía), dibuja planta de cruz latina con cabecera triabsidal escalonada. Cuenta con tres portadas que dan acceso al interior del templo. Y se completa al norte con el claustro.

La portada norte, del Enlosado o de Amayuelas, fruto en sus dos tercios inferiores de la primera campaña de trabajos, que cabe suponer se prolongó durante las tres primeras décadas del s. XIII, se decora con motivos romboidales y florales. Esta portada cuyo atrio quedó configurado en su actual disposición a finales del s. XVIII, se completa hacia la cabecera con un arco ciego engalanado en sus dovelas con once cabezas humanas

Perpendicular a esta portada está el muro de cierre de la crujía Este del claustro, rematada en una balaustrada con elementos decorativos del gótico final y del primer renacimiento, al igual que ocurre en la hornacina que acoge una imagen de la Virgen, y en el que destaca la llamada puerta del Esviaje, abierta en 1540.

La portada meridional o de las Cadenas, fruto en su mitad inferior de la primera campaña de trabajos y que al igual que la portada norte denota una clara asimetría potenciada por el gran rosetón abierto en lo alto, también queda precedida por un atrio configurado en su aspecto actual en 1783.

Hacia los pies del templo sobresale, rompiendo el primitivo perímetro del edificio, la capilla del Pilar, levantada entre 1748 y 1753, destacando en su parte inferior una ventana, flanqueada por cuatro columnas corintias, una perdida, de fustes estriados copiosamente decorados con sartas vegetales.

La fachada de poniente, que luce de la obra originaria el friso de siete arquillos ciegos trilobulados que adornan el exterior de la capilla del Sagrario, aparece dominada por la portada occidental y la gran mole de la torre, que se eleva sobre el Pórtico del Perdón o de la Gloria, al que además protege.

En el interior, fruto de la primera campaña constructiva, las tres naves aparecen diferenciadas por pilares con medias columnas. Las bóvedas de las naves laterales, realizadas ya bien avanzado el s. XIII, son cupuliformes; idénticas a las que ya en el s. XIV se utilizaron para cerrar el crucero y la nave lateral, si bien estas aparecen animadas con esculturas.

Las capillas laterales, a las que se accede a través de arcos apuntados y que hoy están protegidas con unas rejas idénticas de mediados del s. XVIII, mostrando como única diferencia los escudos del remate.

En los tramos centrales de la nave principal se significa de forma maravillosa el coro catedralicio, cuyos muros perimetrales, en los que aún se conservan dos pequeñas pero bellísimas puertas coetáneas a su realización, rematan en una engalanada y calada crestería gótica y cuyo acceso queda cerrado por una monumental reja forjada en 1699.

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios