El cambio climático empuja al mosquito de la nieve a La Mancha
Ejemplares de este mosquito, que habita en la alta montaña, han sido detectados en un parque de Ciudad Real
J.M.L.
Ciudad Real
Martes, 5 de julio 2022, 12:44
El mosquito de la nieve (Aedes refiki) vive en zonas frías de Europa donde cae nieve en abundancia. Eso ha sido así hasta ahora ya que ejemplares de esta especie han sido capturados en el Parque Forestal de La Atalaya, en Ciudad Real capital, en La Mancha, donde raramente nieva. Científicos del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), del que forman parte el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y la Universidad de Castilla-La Mancha, y el Grupo de Virología Clínica y Zoonosis del Instituto Maimónides de Investigación Médica de Córdoba, han demostrado la presencia de este mosquito en plena Mancha.
Estos científicos consideran que el cambio climático está detrás de este extraño fenómeno puesto que «existen muy escasas evidencias científicas de que una especie adaptada a ambientes fríos sea capaz de colonizar zonas cálidas, especialmente aquellas que cada año lo son más» indica este estudio que se ha publicado en la revista científica «BMC Zoology».
Según sus autores, esta especie aprovecha el agua del deshielo primaveral para completar su ciclo de vida en los encharcamientos de aguas cristalinas y su hallazgo en Ciudad Real demuestra que las especies de mosquitos, incluso aquellas adaptadas a climas fríos, son capaces de adaptarse a condiciones cambiantes para sobrevivir.
Transmisores de enfermedades
Aunque estos científicos no quieren alarmar, sí reconocen en su trabajo que los estudios enfocados en esta especie son escasos y se desconoce si, como sus parientes invasores -mosquito tigre o mosquito de Corea- es también capaz de transmitir enfermedades como el dengue, el Zika, el Chikungunya o la fiebre amarilla. Además, el mosquito de la nieve es una especie muy agresiva, que se alimenta sobre mamíferos, incluyendo el ser humano, «por lo que su distribución debería ser estudiada con más detalle, especialmente en ambientes urbanos y periurbanos», añade el estudio. A raíz de este hallazgo, los autores de esta investigación recomiendan ser precavidos y tomar medidas preventivas frente a la picadura de mosquitos como evitar, en la medida de lo posible, la exposición en las horas de mayor actividad de mosquitos (amanecer y atardecer); utilizar prendas que cubran toda la superficie corporal, aplicar repelentes tópicos y utilizar barreras como mosquiteras para evitar su entrada en los hogares, sobre todo los cercanos al Parque Forestal de La Atalaya, en Ciudad Real.