La guía definitiva para entender la ordenanza de rótulos de Salamanca: escabechina a la vista
La regulación de la cartelería publicitaria implica criterios específicos que pocos locales de la 'Ciudad Vieja' cumplen
Comienza la cuenta atrás: tres meses tienen los comercios de Salamanca para adaptarse a la ordenanza municipal que regula la cartelería publicitaria. Un amplio dossier que recoge los criterios a los que tendrán que adaptarse los locales y que busca «minimizar el impacto de los rótulos y carteles publicitarios procurando un resultado homogéneo y de calidad». Dos objetivos comunes pero con aplicaciones diferentes en función de la zona: mayor vigilancia para el ámbito central de protección del Plan de Gestión de la Ciudad Vieja de Salamanca -incluido el Conjunto Histórico- y otros criterios distintos para el resto del término municipal.
Desde principios de agosto, los locales de Salamanca tendrán que estar adaptados a esta ordenanza. En caso contrario, las sanciones podrían alcanzar hasta los 3.000 euros en el caso de que sean consideradas 'muy graves'. La falta de limpieza y ornato público será calificada de 'leve' con sanciones de hasta 750 euros y faltas graves multadas hasta con 1.500 euros. La amenaza de las posibles sanciones, la falta de información precisa y el temporizador que pitará en unos meses tiene algunos comerciantes desconcertados y a los rotulistas, desbordados.
Primitivo es rotulista en la empresa Rótulos Salamanca y será el encargado de llevar a cabo algunas de estas modificaciones en la ciudad. Algunos clientes ya le han hecho saber su desconocimiento ante esta ordenanza y la pregunta clave se extiende como la pólvora entre los propietarios de los locales. «¿El mío cumple con la nueva regulación?». Para resolver esta pregunta, Primitivo ha acompañado a Salamancahoy con metro en mano por algunas calles céntricas de la capital y la Plaza Mayor para conocer a qué se enfrentan los comerciantes y ejemplificar los artículos recogidos en el dossier.
Medida de las letras, espacio entre el hueco de la fachada y el suelo, colores, pantallas, luces, orden...un sinfín de acepciones que Primitivo conoce ya como la palma de su mano y que pocos comercios del casco histórico consiguen aprobar al cien por cien. «Es muy complicado que se cumpla perfectamente la nueva normativa, la mayoría suspende», asegura.
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PermitidoRótulos integrados
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No PermitidoLuz con color
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No PermitidoPantalla luminosa
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PermitidoPlaca con la carta de un restaurante
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No PermitidoRótulo excesivamente grande
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No PermitidoUso indiscriminado del color
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No PermitidoDistancia superior a la permitida
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PermitidoIluminación blanca
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No PermitidoSaliente demasiado ancho
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No PermitidoAcabados metalizados
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No PermitidoColores llamativos
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PermitidoSangre de toro
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No PermitidoMaterial no adecuado
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PermitidoMaterial textil
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No PermitidoBanderolas muy próximas
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No PermitidoExposición irregular
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No PermitidoIluminación intermitente en farmacias
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PermitidoDirectorios ordenados
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No PermitidoPlacas que exceden las dimensiones
Varios ejemplos que reflejan la realidad de Salamanca: una alta mayoría tendrá que remplazar su rótulo si quieres cumplir con la ordenanza de cartelería publicitaria. Fuera del ámbito central de protección del Plan de Gestión de la Ciudad Vieja de Salamanca, los criterios son algo más flexibles aunque también supone un cambio importante al que se tienen que enfrentar los propietarios de los locales. Respecto a la zona más protegida, las licencias son más amables en cuanto al tamaño de los rótulos, sin restricción de calles para la utilización de banderines y sin prohibición explícita a las pantallas publicitarias.
Dos zonas distintas para las que la ordenanza es también diferente. Por su parte, la presidenta de la patronal del comercio Asecov, Soledad Gómez, ya compartía en una jornada informativa impulsada por la patronal CEOE Cepyme, la complejidad de esta nueva regulación. «Es bastante estricta para los negocios del centro de Salamanca», apuntaba entonces. No queda mucho margen para ponerse manos a la obra aunque el tiempo no es el único problema. «Además de que hay que cumplirlo antes del 8 de agosto, supone un coste adaptar los carteles y además no hay muchas empresas que se encarguen de ello en Salamanca».
Se avecina así una oleada de solicitudes de licencias para el cambio de rótulos y la consecuente puesta en marcha por parte de los rotulistas que asumirán en las próximas semanas una cantidad importante de trabajo. De hecho, ya se están entregando una carta personalmente a los comerciantes de la zona de Plaza Mayor y el casco histórico para que presenten una declaración responsable necesaria antes de la instalación de cualquier elemento decorativo.