Saúl se desvincula del Atlético y ficha por el Flamengo de su excompañero Filipe Luis

Saúl Ñíguez ha dejado este miércoles de ser jugador del Atlético de Madrid, con el que le le vinculaba aún un año más de contrato, y ficha por el Flamengo carioca, club en el que ha sido recibido como un ídolo y donde será entrenado por Filipe Luis, con quien compartió vestuario en el club rojiblanco. También se reencontrará con Jorginho, mediocentro brasileño con quien coincidió cuando el ilicitanto actuó como cedido en el Chelsea.

Final feliz para todas las partes de un culebrón que se ha prolongado demasiado, desde que el rendimiento de Saúl decayó y pasó de ser un jugador indiscutible para el Cholo Simeone a un lastre. No fructificó su cesión con opción de compra al Chelsea, tampoco enamoró el curso pasado a la afición sevillista y Simeone no le quería un verano más de vuelta en la pretemporada del Atlético, que se libera de una ficha altísima que ronda los ocho millones de euros netos anuales.

En los últimos dias se dio por hecho que Saúl, de 30 años, iba a firmar por cuatro temporadas por el Trabzonspor turco, pero la situación de un giro de 180º cuando el futbolista rompió con el club de Trebisonda alegando motivos familiares. Al final, se ha decantado por el célebre equipo de Río de Janeiro, al que exigió un contrato largo de al menos tres temporadas.

Saúl, de 30 años, deja atrás una extensa etapa en el Atlético que se inició en 2007, cuando se incorporó a la Academia con solo 12 años. En 2011 ya se estrenó con el filial y muy poco después, en marzo de 2012, Simeone le dio la alternativa en el primer equipo en un partido de la Liga Europa contra el Besiktas. Fue el primero de los 427 que jugó en hasta el final de la 23-24. Después, se despidió entre lágrimas rumbo al Sevilla, una segunda cesión tras la del Chelsea en la 21-22, que debía ser definitiva pero resultó un fiasco.

Su trayectoria ha estado marcada por un ascenso meteórico y una caída en picado. Su irrupción fue espectacular, la de un centrocampista moderno, poderoso, con conducción, llegada y gol. Fue determinante en varias noches mágicas europeas, como la de ese gol maradoniano al Bayern en 2016, otro estupendo al Leverkusen en 2017, o el tanto al Liverpool en 2020. Saúl es el tercer máximo goleador histórico del Atlético en Champions, con 11 dianas, tras Luis Aragonés (12) y Griezmann (38). En total, firmó 48 goles como colchonero.

Internacional y pretendido en su mejor momento por gigantes como el Bayern, el Manchester United o el Barça, Saúl consiguió que el Atlético le firmase en 2017 una renovación de estrella y de gran duración, hasta 2026 con esos casi ocho millones de salario por ejercicio. Su valor de mercado llegó a alcanzar los 90 millones, y ahora, sin embargo, Transfermarkt le valora en apenas tres. Por el bien de las dos partes, la etapa de Saúl en el Atlético ha llegado a su fin.