El fútbol salmantino se despide de su árbitra americana

Victoria Tarna Zander es una joven árbitra brasileña criada en Georgia, Estados Unidos, que vino a Salamanca hace dos años y medio para estudiar en la Universidad y retomó el arbitraje de nuevo.

Su pasión y lo que la ha llevado a esta profesión ha sido siempre el fútbol. Empezó a jugar con tan sólo seis años aunque su sueño de ser jugadora se vió interrumpido a los doce por una lesión. En ese momento, empezó a arbitrar con dos amigas y «desde entonces, he estado enamorada completamente», afirma.

De Salamanca se lleva una experiencia enriquecedora. Sostiene que es una ciudad con mucha cultura e historia y eso es lo que más le ha cautivado, además del ambiente y la gente.

Victoria reconoce que no es fácil arbitrar el fútbol base porque, aunque se aprende mucho, el nivel de exigencia es muy alto y «a veces el camino se complica pero merece la pena». Aún así, es cierto que no hay un campo en el que sea más difícil arbitrar porque siempre depende de muchos factores como el momento, los jugadores, el partido y el resultado.

En la profesión, no ha sentido trabas por el hecho de ser mujer «en este sentido, he tenido suerte». Aún así, la trencilla americana piensa que aún queda mucho trabajo por hacer en este aspecto en el ámbito deportivo, ya que hay falta de confianza en la habilidad o conocimientos femeninos respecto al fútbol.

El mejor recuerdo que se lleva de esta etapa es cuando ascendió a Primera RFEF como asistente femenino y sintió todo el apoyo por parte de sus compañeros salmantinos. «Sin ellos nunca habría podido llegar tan lejos», declara. Gracias a este progreso, ha podido viajar y conocer muchos lugares de España y, en particular, a la Federación en Madrid. Se lo lleva como una gran experiencia para su formación arbitral y un orgullo el haber podido conocer a referentes para ella.

Antes de venir a España arbitró durante diez años en Estados Unidos. Asegura que allí el fútbol es muy diferente, todavía no está muy desarrollado y se organiza de otra manera, con muchas ligas diferentes. Explica que, por ejemplo, hay fútbol muy competitivo en los institutos y en las universidades. «En España es más rápido y se juega más, hay más nivel».

Ahora, Victoria vuelve a Estados Unidos por temas de estudio y, entre sus planes de retorno, se encuentra continuar progresando en el arbitraje y cumpliendo sueños.

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