Airbus pierde casi 10.000 millones de valor en Bolsa con un nuevo fallo en los A320

Airbus sufre en Bolsa los fallos de software que este fin de semana obligaron a la compañía a dejar en tierra a más de 6.000 aviones del modelo A320, el más utilizado por las aerolíneas. Pese a que el gigante aeronáutico ya ha resuelto el problema en la mayoría de sus aeronaves –salvo en un centenar sobre las que se sigue trabajando–, las dudas de los inversores se ciernen sobre el valor, que llegó a perder un 10% en los peores momentos de la sesión. Al cierre de los mercados europeos, esa caída rondó el 5,7%. En la práctica, eso se traduce en una pérdida de 9.100 millones de euros, dejando su capitalización en 153.200 millones.

La huida de los inversores se aceleró tras conocerse que, a los fallos del software en sus aviones más vendidos comunicados el fin de semana, se suman ahora otros «problemas de calidad» en la producción de algunos paneles de fuselaje en el mismo modelo. En este caso, el riesgo estaría limitado a unas decenas de aviones. «El origen del problema ha sido identificado y contenido, y todos los paneles de nueva producción cumplen con todos los requisitos», declaró un portavoz de la compañía a la agencia Reuters.

Pese a ello, el mercado prefiere alejarse de la compañía, ante el temor a que no pueda cumplir sus objetivos de entrega para este año. «Estamos trabajando con nuestras aerolíneas clientes para apoyar la modificación de las aeronaves y garantizar que puedan volver a operar», defendía Airbus en un comunicado que la empresa también aprovechó para disculparse. «La compañía agradece a sus clientes, autoridades, empleados y a todas las partes interesadas su apoyo en la implementación de estas medidas y su comprensión de la decisión de priorizar la seguridad por encima de cualquier otra consideración», apuntó en su escrito, después de que compañías como la estadounidense American Airlines, Air India, la húngara Xizz Air o Air New Zeland avisaran el pasado sábado de retrasos, interrupciones y cancelaciones en sus servicios a raíz del problema.

Los analistas se muestran divididos al respecto. El departamento de análisis de Banco Sabadell considera que el fallo del fin de semana es una noticia negativa aunque «de impacto limitado» por la «excepcionalidad del incidente» y porque las aerolíneas «tan solo tienen que implementar una actualización del software afectado». De hecho, la compañía sigue recibiendo pedidos en otras areas de negocio. El último, del propio gobierno español, que ha adjudicado a la compañía un contrato público valorado en 237 millones de euros para la adquisición de otros 13 helicópteros H135, la instalación de equipos de misión, mejoras en las 18 unidades adquiridas en una primera fase del mismo programa de compras, un simulador y el apoyo logístico inicial para los próximos cinco años, según figura en el portal de contratación del Estado.

Sabadell ve, de hecho, muy positiva la reacción de la compañía, que en poco tiempo investigó el incidente, encontró la causa y en pocas horas coordinó una acción con todas las aerolíneas afectadas, lo que redujo el impacto del problema. Por ello, señalan que «aprovecharían la caída» para comprar acciones de la empresa.

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