Así votaron los barrios de Salamanca en 2019: donde ganaron PP y PSOE

La victoria electoral este domingo va a depender de cómo reaccionen los salmantinos a la convocatoria. Los candidatos de PP y PSOE lo saben muy bien: hace cuatro años acabaron superados por poco más de 1.700 votos y la clave estuvo en el comportamiento de los barrios. Si en 2015 el PP arrasó casi calle por calle y fue la fuerza más votada en casi toda la ciudad, en 2019 el PSOE le plantó cara y el resultado fue un mapa en dos anillos: el centro votó PP y los barrios, PSOE.

En 2019, PP y PSOE se repartieron la victoria en todos los barrios y en prácticamente todas las mesas: Cs se impuso sólo en cuatro. El voto se dividió en dos zonas bastante bien diferenciadas, con el centro en color azul y la corona exterior en rojo.

El voto 'popular' se hizo fuerte en prácticamente todo el centro de la ciudad. Los distritos Centro, San Juan, San Vicente, Carmelitas, Sancti Spíritus, Canalejas, Las Claras, Alamedilla, Labradores, Salesas, Ciudad Jardín y Estación fueron del PP. Sobre un mapa, la mayoría corresponden con el área más céntrica de la ciudad, con incursiones como la de Ciudad Jardín y el área de Vistahermosa.

Por su parte, el PSOE se hizo con casi todos los barrios que forman el anillo por fuera de la zona más céntrica. Ganó en Prosperidad, San Isidro y El Rollo, también en El Tormes, San José, El Zurguén, Tejares, Chamberí, Los Alcaldes, Buenos Aires, Vistahermosa, Teso de la Feria, Pizarrales, barrio Blanco, Capuchinos, La Plata, Vidal, Chinchibarra, Garrido y Puente Ladrillo.

Sobre el papel, estro distribuiría la opción política de los barrios conforme a su riqueza, pero la relación no es directa. Según los datos de la Agencia Tributaria, el centro concentra las rentas más altas y los barrios trastormesinos, las más bajas.

Pero no es tan sencillo. Los datos del IRPF corresponden con nueve zonas y los distritos electorales son muchos más. Y en 2015 el PP arrasó en la ciudad, ganando en todos los barrios, ricos y pobres, y con victoria casi calle por calle, salvo en zonas de Pizarrales, Rollo, Buenos Aires y Aldehuela. La clave definitiva está en Ciudadanos y Vox, y en el 2015.

El partido 'naranja' logró en 2019 un gran resultado y eso dividió bastante el voto de derechas. Cs fue segunda opción en feudos del PP (Sancti Spíritus, Labradores) y del PSOE (Rollo, Zurguén, Tejares, Chamberí, Buenos Aires, Teso de la Feria, Vistahermosa, Pizarrales), pero en casi todos los casos le restó votos a los 'populares' ya que fue segunda y tercera fuerza en todos los barrios, mientras Podemos se vio relegado en muchos barrios a quinta fuerza, esplazado por Vox, que ya asomó como opción.

La candidatura coaligada de IU y Podemos sumó muchos menos votos que Ganemos en 2015, pasó de 4 a dos concejales y le restó menos de lo esperado al PSOE como opción alternativa de izquierdas (6.000 sufragios y un 8%), aunque con sus votos Mateos podría haber ganado las elecciones: menos de 1.800 votos le separaron de ser la fuerza más votada, aunque sin opciones de sumar.

Por su parte, Vox se convirtió en quinta fuerza, a un paso del 5% mínimo para haber entrado al menos en el posible reparto, aunque con 3.386 votos en total lo habría tenido difícil al aplicar el método d'Hondt. con todo, fue el partido con más votos que no consiguió concejal desde 1999.

Sólo a IU le fue peor: en 1999 no logró mantenerse en el consistorio a pesar de sumar 3.704 votos. Antes, el CDS se quedó fuera con 3.648 en 1983. En 1991, IU logró el concejal más 'barato', uno con 4.081 votos, entonces el 5,19% de los votos válidos, la cifra mínima en todas las convocatorias para entrar en el pleno de la capital. Ese es el objetivo para los que aspiran a repetir.

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