'La casa del chollo' logra su primer éxito durante la apertura: «Ha sido un no parar»
Durante la mañana, el negocio no ha cesado de recibir a todas aquellas personas que han querido pasarse para ver y comprar los diferentes productos
Son las 10:00 horas de la mañana en Salamanca y 'La casa del chollo' abre sus puertas al público por primera vez. La gente entra, mira, prueba, pregunta. Y, por supuesto, empiezan las primeras ventas. Máquinas de afeitar, biberones para bebés, cepillos de dientes eléctricos y ropa son los primeros artículos que los clientes ponen en el mostrador para comprar, aunque detrás vienen cada vez más objetos y por la puerta no paran de entrar personas que quieren ver lo que ese negocio esconde.
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A las 12:00 horas de la mañana la cola de personas no paraba de aumentar y cada vez son más los que quieren mirar para ver qué se llevan a sus casas. Pasan los minutos y la situación no cesa, incluso ya hay clientes que han dejado sus datos de contacto porque quieren un producto concreto y esperan que los dueños les ayuden a encontrarlo. Definitivamente, la primera mañana de apertura ha sido un éxito y una «gran sorpresa» para Javier y Rebeca, que afirman que «ha sido un no parar».
«No nos esperábamos tanta gente, teníamos un ligero temor al recibimiento que nos pudieran dar los clientes, aunque viéndolo ahora ha sido mucho más de lo que nos podíamos esperar y ha superado nuestras expectativas. No teníamos ni idea de cómo iba a ir, estábamos muy nerviosos, pero sin duda estamos más que contentos y satisfechos con la acogida», comenta Rebeca.
Funcionamiento
Hasta que los productos se ponen a la venta y los compran los clientes, hay un largo proceso muy exhaustivo en el que cada uno de los pasos se hace con el mayor cuidado posible y prácticamente al detalle.
Este proceso comienza cuando Javier y Rebeca, que en este caso son los dueños de la tienda, les compran a sus proveedores las cajas de los productos a través de una subasta en función de sus propios criterios y experiencia de lo que puede dar más rentabilidad o puede ser más interesante para los clientes.
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Una vez que esos productos llegan a la tienda, se miran minuciosamente para asegurarse de que funcionan como corresponde, tienen todas las piezas al completo y son aptos para la venta. Y una vez que ese paso se ha completado, se estipula el precio y en función de su embalaje y de si tienen o no etiquetas, se le asocia un color: azul para los productos nuevos y amarillo para los productos seminuevos.
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