La luz y el fervor arropan a la Virgen del Carmen en la ribera del Tormes
Como cada 16 de julio, cientos de devotos acompañan a la patrona de los marineros y pescadores desde la iglesia del Carmen de Abajo
La devoción salmantina vive uno de sus puntos álgidos de la época estival a mediados del mes de julio. La festividad de Nuestra Señora del Carmen, patrona de los marineros, pescadores y la Armada española, se vive con gran fervor en diferentes puntos de la provincia salmantina. Municipios como Ledesma, Peñaranda de Bracamonte o Alba de Tormes llevan a cabo veneraciones, rosarios, procesiones y eucaristías para honrar esta veraniega celebración mariana.
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Y la capital no iba a ser menos. En el punto central de la diócesis salmantina tiene lugar el acto más vistoso, que pone fin a todas estas celebraciones. Desde la iglesia del Carmen de Abajo, la Orden del Carmelo y la Cofradía de la Oración en el Huerto de los Olivos culminan la semana de cultos y honores con la salida en procesión de la Virgen del Carmen por la ribera del Tormes, produciéndose una de las imágenes más particulares de estas fechas al pasar la talla por debajo del Puente Enrique Estevan. La virgen se «recoge» dentro de las andas para poder pasar por debajo del arco de hierro del puente.
Una vez llega al otro lado, la virgen vuelve a surgir entre vivas y aplausos del público. A lo particular de la escena hubo que añadirle la magia de que coincidiese la iluminación del paso con la de la Catedral Nueva, dejando a Nuestra Señora del Carmen, a pesar del calor, arropada por la luz y el fervor popular.
La Banda de Cornetas y Tambores del Cristo del Amor y de la Paz y un grupo de tamborileros fueron el acompañamiento musical.
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