La negociación del convenio decidirá la implicación de los transportistas de Salamanca en la huelga nacional

Actualización: La negociación del convenio decidirá la implicación de los transportistas de Salamanca en la huelga nacional

Este lunes saltaban todas las alarmas. Los sindicatos CCOO y UGT convocaban una huelga general en el sector del transporte por carretera para los días 28 de octubre, 11, 28 y 29 de noviembre, 5 y 9 de diciembre e indefinida a partir del 23 de diciembre -en plena campaña navideña-. A este parón están llamados los trabajadores del transporte de mercancías y también de viajeros, así como los autobuses urbanos de titularidad pública. Pero, ¿los profesionales salmantinos secundarán esta huelga estratégicamente colocada en una temporada clave?

Todo dependerá de la negociación del convenio de Salamanca de transporte de mercancías por carretera que tendrá lugar este mismo miércoles. El acuerdo que se obtenga de esa reunión colectiva marcará la participación de los salmantinos en esta huelga nacional. «Creemos que puede influir, si llegamos a algún punto en común, puede que no tenga tanta incidencia en Salamanca», explicaba José Antonio Gallego, responsable provincial de Comisiones Obreras.

El objetivo de esta huelga es lograr la regulación de la jubilación anticipada de los conductores profesionales. Sin embargo, en la negociación clave que afectará a los transportistas salmantinos se tratará fundamentalmente el aspecto económico. «No es un asunto que nos ha causado batalla en la negociación del convenio. La jubilación anticipada igual que las horas extras es un tema que llevamos luchando mucho, pero es la cuestión económica para este año y los dos siguientes lo que más se va a tratar en la negociación», aclara José Antonio Gallego que confía en que la jubilación anticipada en el sector «prospere a nivel estatal».

A pesar de que se enfrentan a estas dos situaciones -por un lado la negociación de su propio convenio y por otro lado la huelga general para alcanzar la jubilación anticipada- de una manera paralela, se teme que el parón pueda acabar «distorsionando» todo. «Estamos expectantes a ver cuáles son las demandas concretas de los sindicatos», comentan fuentes empresariales.

Además de los aspectos económicos y la siniestralidad asociada a la alta edad de los conductores, dos aspectos protagonistas en la lucha actual de los transportistas también se cuela la falta de relevo generacional -muy relacionada, precisamente, con la jubilación anticipada-. «Ahora mismo hay muy poco recambio y hay empresas que no serían capaces de asumir esas prejubilaciones», explican desde fuentes patronales. Precisamente esta realidad dificulta las propuestas realizadas por parte de los sindicatos para que las reivindicaciones se conviertan en una realidad.

CC OO y UGT piden que esta jubilación anticipada se realice mediante la fórmula de la aplicación de coeficientes reductores por la penosidad y peligrosidad de la profesión. Hasta que se concrete ese coeficiente, piden una jubilación parcial con contrato de relevo, voluntaria para la persona conductora que pueda acumular de forma continuada el porcentaje de horas que tiene que trabajar y que, en su lugar, entre una persona joven, como medida provisional.

Si no se llega a un acuerdo, los transportistas tomarían tres fechas clave: el Black Friday, el puente de diciembre, y Navidad. El temor de un colapso que provoque desabastecimiento, carreteras paralizadas, caos en el transporte público o retrasos en el envío de comprasos se ha extendido desde el anuncio de la huelga. «Hay que buscar fechas en las que se tenga más repercusión y el sector del transporte tiene muchos subsectores que tienen una incidencia importante en el día a día de todos», sentencia responsable provincial de Comisiones Obreras.

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