Tejares critica los agravios comparativos hacia los barrios trastormesinos por parte del Ayuntamiento

Todo para los barrios de la ribera del Tormes, pero sin ellos. Al menos sin los de la zona trastormesina. Ese es el sentimiento que tiene la asociación de vecinos Virgen de la Salud de Tejares, muy escéptica sobre el valor que le da el Ayuntamiento de Salamanca a la participación ciudadana en el marco del EDUSI Tormes+ y la Estrategia de Infraestructura verde Savia.

A la directiva de este colectivo no le sorprende, pero sí le duele, ver cómo el alcalde, Carlos Carbayo, y la concejala de Medio Ambiente, Miryam Rodríguez, protagonizan estos días numerosas fotografías en obras e infraestructuras relacionadas con estas iniciativas, de cuyos avances se enteran más por los medios que por la Corporación Municipal.

«Que Miryam sea una persona cercana, que venga a vernos y nos ponga tres cosas no es suficiente», a juicio de los representantes vecinales que piden «que nos muestren un calendario de mínimos, que nos digan claramente lo que quieren ir haciendo en cada momento».

En este sentido aseguran que «no sabemos en qué fase se encuentra cada actuación porque, por ejemplo, ella vino y dijo que se iban a poner muchos árboles en el parque Lazarillo y en otras zonas. Se habló de poner flores y reponer setos. Han arrancado dos árboles que estaban secos, pero no vemos más movimiento y el mejor momento de plantar es ahora», apuntan.

El problema en este caso como en otros, prosiguen, es que no se les explican claramente los pasos y plazos para las intervenciones. «Así no sabemos si están procastinando o si realmente se les ha planteado una dificultad que podemos o no compartir o entender». Al final les cansa que «o das caña, o las cosas solo se mueven porque se acercan las elecciones. No porque se haga una labor constante preventiva y de mantenimiento sobre lo que hace falta». Pero además, «siempre hay un agravio, porque ves que en otras zonas de la ciudad no es lo mismo», señalan.

El viernes, el Ayuntamiento celebró su Savia Day, una jornada de sensibilización ambiental con entrega de premios a entidades que han colaborado en el proyecto.

La asociación Virgen de la Salud critica que fueron informados de este evento «a través de un simple correo electrónico. No ha habido ni una llamada de cortesía, que sería los suyo«, apunta José Carlos Dorado.

«Nosotros nos quejamos y pedimos cosas, por eso no nos ponen facilidades para que acudamos ni nos van a dar premios», añade. En esta línea, afirma que la concejala de Medio Ambiente sabe que a los representantes de este colectivo vecinal les resulta muy difícil acudir a actos celebrados por la mañana.

Aunque les hubiera gustado poder estar presentes para tener más información de primera mano sobre lo que se está haciendo y aprender cosas en la sesión más técnica, una vez más se tienen que conformar con ver las fotos en la prensa.

La situación les parece un agravio más qué sumar a la lista. «Tampoco nos invitaron en su día a la inauguración de la pasarela. Es como si la hubieran hecho para que los vecinos de Huerta Otea pudieran ampliar sus paseos hasta aquí, pero no para que nosotros vayamos al otro lado. Siempre ha habido clases», bromea. Pero enseguida recupera la seriedad para hacer hincapié en el hecho de que en esta ocasión tampoco figura ninguna asociación vecinal trastormesina en la foto del Savia Day.

Desde la directiva añaden que «nosotros siempre hemos colaborado con todo y hemos estado en las reuniones del Tormes+ y Savia», a pesar de que «desde el primer día» sintieron que sus peticiones y necesidades no eran tenidas en cuenta. Uno de los ejemplos más llamativos y cuya decepción también comparte el colectivo vecinal de Buenos Aires, es el proyecto de la Ciudad Deportiva Lazarillo.

Cuando se les presentó la iniciativa, ambas organizaciones no salían de su asombro por considerarlo «elitista y alejado de las necesidades reales de estos barrios». En su opinión, ellos no necesitan «esgrima y otras actividades emergentes», y menos aún si eso supone que hay que pagar por entrar.

«Nosotros pedíamos unas sencillas pistas de pádel, con entrada gratuita. Son baratas de construir si haces cuatro paredes en cruz y los usuarios solo necesitan tener las palas y las pelotas. No veo a los vecinos comprando las caras equipaciones de esgrima para venir a darse espadazos», critica. También afirma que se podían haber arreglado las antiguas pistas deportivas que tampoco requerían un presupuesto elevado. Como el terreno era de tierra, solo había que hacer las chanchas, poner las correspondientes vallas y dotarlas de una iluminación adecuada.

«Pensarán que eso son sólo pistas de medio pelo, pero al menos es algo que ya se podía estar disfrutando». En cambio, se están invirtiendo más de 2,5 millones de euros y mientras se construye el complejo deportivo Tejares lleva ya unos años sin instalaciones deportivas. «El alcalde ha estado haciéndose fotos allí esta semana, pero no con los representantes del barrio», recuerda.

Tampoco han vuelto a saber nada del frontón prometido por Mañueco cuando era alcalde de Salamanca. Cuando se eliminó el anterior para hacer una plaza, se llegó al compromiso de construir otro en un lugar más adecuado. «Esta semana también ha dicho Carbayo que el Ayuntamiento tiene unas cuentas muy saneadas. Si hay dinero,¿por qué no se cumple con esta promesa que tenía que haberse ejecutado hace ya unas legislaturas?», pregunta. Además, «en la ciudad hay otros y funcionan bien, se usan». De hecho, en el parque de Würzburg se cubrió completamente el frontón semicubierto mientras ellos esperan recuperar esta instalación. «De nuevo, otro agravio para esta margen del Tormes».

Hace un par de semanas se produjo el último reventón de tuberías en Tejares. Una vez más, su arteria principal, la avenida de Juan Pablo II, parecía un río. Y de nuevo algunos vecinos se quedaban sin suministro durante un día entero.

Hasta que no se sustituya hasta el último metro de la antigua canalización de fibrocemento el problema se seguirá repitiendo. Una parte ha sido renovada y eso ha trasladado las averías hacia la zona más próxima a la fuente. Pero como estas intervenciones son costosas, no se ha cambiado por completo. En su lugar, se colocan válvulas reductoras con las que se pretende controlar la presión y así evitar los reventones.

Pero este «apaño» no satisface ala asociación, que recuerda que el Ayuntamiento cobra un canon a la empresa que gestiona el servicio y que tiene que invertirse en este tipo de mejoras. Sin embargo, no hay presupuesto para la renovación de estas tuberías este año. «Que dejen de poner jardineras voladoras en el centro y se gasten el dinero en lo que hace falta».

José Carlos Dorado lamenta que desde la asociación están hartos de tener que presentar una y otra vez quejas y peticiones sobre los mismos problemas. «Lo bonito sería poder pensar en cosas nuevas, plantear nuevos proyectos para mejorar el barrio. Pero tenemos que mandar los mismos escritos machaconamente hasta que no se terminen de resolver muchos problemas de siempre. Como las tuberías que son imprescindibles. Y no podemos seguir avanzando. Ahorrar el agua que se despilfarra en los reventones también se supone que es una de las prioridades del proyecto Tormes+ y de la Estrategia Savia», concluye.

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