La carretera con 11 kilómetros de 'piel de cocodrilo' entre dos pueblos de Salamanca que hace peligroso un paso de montaña

El arreglo de una de las carreteras más recónditas de la provincia y entre las primeras que sufre cortes por la nieve da un primer paso con la publicación de la lista de fincas, árboles y cerramientos que habrá que expropiar para ensancharla. Se trata de la DSA-352, que une Serradilla del Arroyo y Monsagro y acaba en el evocador Paso de los Lobos, un fantástico mirador a la zona más agreste de la sierra de Salamanca.

El proyecto lleva en marcha desde 2023 y ahora se va a ejecutar su primera parte, un tramo de 11 kilómetros entre las dos localidades que afecta además a un pequeño puerto de montaña, el alto Cruz de la Rubia, en el límite de los términos municipales. Para más adelante queda la continuidad hacia el paso de los Lobos, otros 13 kilómetros de una orografía complicada, un tramo de carretera lleno de curvas esculpidas en una ladera que van a dar a la subida hacia el santuario de la Peña de Francia y, si seguimos viaje, a La Alberca.

El tramo en el que se va a actuar primero presenta las condiciones habituales de estas carreteras de montaña. La calzada es estrecha, 4,5 metros y menos en casi todo el trazado, con un arcén mínimo de 20 centímetros, aunque en casi todo el tramo es inexistente o está lleno de vegetación.

En cuanto a su estado, el firme actual se encuentra bastante agrietado y fisurado (principalmente 'piel de cocodrilo' y alguna fisura longitudinal); se conoce así asfalto con una serie de grietas conectadas que tienen una forma muy parecida a la que presenta este conocido animal en su superficie. Además, hay pequeños puntos donde la capa de rodadura es inexistente y algunas zonas con los bordes junto a la berma o arcén descarnados, aunque no presenta cesiones ni blandones considerables.

En todo el tramo previsto, el pavimento está formado por una base de macadam de unos 15 centímetros de espesor colocado sobre el terreno natural, a la que se le han aplicado uno o varios tratamientos superficiales con gravilla, arena o una combinación de ambas de un espesor que ronda los 2-3 cm, no presentando en general cesiones ni deformaciones. Se aprecia que se han realizado numerosas reparaciones de las mismas características a lo largo todo el tramo, por lo que la realidad es que se ve un pavimento con una gran cantidad de parches y remiendos.

La necesidad de rehabilitación o renovación superficial del tramo de la carretera DSA-352, se justifica por las deficiencias que presenta el estado superficial del pavimento y que afectan a la seguridad de la circulación, a la comodidad del usuario y a la durabilidad del mismo.

En este sentido, el trayecto es una sucesión de baches que se traducen en traqueteos en cualquier vehículo tanto entre los dos municipios como para llegar hasta el mirador del paso de los Lobos, donde la carretera se une con la de la peña de Francia, que se encuentra en mejor estado y que va a recibir mejoras para separar la calzada del precipicio.

En cuanto a la DSA-352, en este primer tramo lo que se va a hacer es ensanchar la calzada principal hasta los 5,50 metros, recreciendo arcenes; la calzada llevará una mezcla bituminosa de tipo hormigón más resistente y en los márgenes se aplicarán zahorras. Se cambiará la señalización horizontal y vertical, se sanearán baches y se arreglarán accesos de caminos. Además, se hará una actuación especial creando una nueva cuneta en la bajada del alto de La Rubia hacia Monsagro y se revisarán las travesías de ambos pueblos, en buen estaod.

Para hacer sitio a la nueva calzada más ancha hay que expropiar numerosas ficas, unas 140 sólo en Monsagro, que incluirán pagar por cercado, vallas, porteras y un importante número de árboles que tendrán que desaparecer.

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