La ceremonia del 'honoris' de Nadal en Salamanca, paso a paso: del cortejo a un final de vino dulce y mazapán

La ceremonia de entrega del doctorado Honoris Causa en la Universidad de Salamanca es un acto único y peculiar, lleno de simbolismo y ritos que recuerdan la larga historia de la institución. Sólo tres al año se conceden como máximo, aunque la universidad se puede reserva alguno por interés institucional.

El Doctorado Honoris Causa es la máxima distinción académica conferida por la Universidad de Salamanca. Se instauró en el año 1922 con una reforma normativa y sustituyó a otras distinciones, unificándola como la mayor entre las universidades. La entrega de esta distinción es uno de los actos académicos solemnes de la ocho veces centenaria Universidad, junto con la toma de posesión del nuevo Rector y el acto de apertura del curso. El escenario, el Paraninfo del edificio histórico de la Universidad.

La concesión de este reconocimiento se rige actualmente por una normativa de 2011, modificada en 2014, que establece algunos preceptos que no se van a cumplir. El primero, la fecha de la entrega, reglamentariamente reservada para el mes de junio y que se ha llevado a octubre, porque la normativa permite esta excepción.

Se conceden un máximo de tres al año, salvo propuesta excepcional, y tiene que haber un equilibrio entre especialidades (Ciencias, Letras y Técnicas), además de especial atención a las mujeres, en franca minoría. Se recogen posibles nombramientos de doctores Honoris Causa realizados por su interés institucional para la Universidad, que podrán celebrarse en una ceremonia específica, como es el caso.

Según el reglamento, las más importantes universidades del mundo han tratado de preservar el carácter necesariamente excepcional de la concesión de los doctorados Honoris Causa y han desarrollado para ello las correspondientes normas. El acto académico se desarrolla conforme a un ceremonial en lengua latina que arranca con la vistosa llegada del cortejo de doctores al paraninfo: a partir de ahí, se cuentan los minutos para tener un nuevo centinela de la sabiduría.