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El Salamanca Rugby Club jugará la fase final por el ascenso con el objetivo de subir de categoría y alcanzar la División de Honor B. Lo ha logrado haciendo bueno el resultado del partido de ida ante el equipo de Santander y amarrando un sufrido empate.
En un partido muy bronco, en el que el ritmo lo ha llevado el equipo visitante del GPLOIL de Santander, el Salamanca Rugby Club ha conseguido hacer buena la ventaja del partido de ida y, tras el empate a 19 de este sábado, pasar a la final de la fase de ascenso a División de Honor B.
El equipo salmantino ha vuelto a pecar de inexperiencia y falta de control del partido, dejándose llevar por un contrario que prefiere un juego duro, lento y de castigo constante de delantera. Y en ése juego, sufren mucho, cometiendo demasiados golpes de castigo y sufriendo tarjetas amarillas y puntos en contra.
La primera parte fue una constante defensa, aguantando en inferioridad, frente un ataque directo cántabro, pero se llegó al descuento con el marcador 5-3 tras un ensayo de Payo y un golpe visitante.
En cuanto a la segunda parte, tras dos ensayos seguidos de Sergio y Christian mediado este segundo período, parecía que la eliminatoria se encarrilaba, pero de ahí al final volvió el juego bronco, duro y, en ocasiones, sucio de los santanderinos, que desquiciaron a los charros, pero que solamente logró el empate en la última jugada del partido.
Así pues, ahora toca jugar la final de la fase de ascenso frentes al campeón del grupo norte: Gijón Rugby. Los partidos, los dos próximos fines de semana.
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