Prueba Bajaj Dominar 400: una estrella de Bollywood que quiere triunfar en Europa

Shah Rukh Khan, Pawan Kalyan o Hrithik Roshan son nombres de actores indios completamente desconocidos en el continente europeo y, sin embargo, en su país de origen son auténticas superestrellas del cine de Bollywood, idolatrados por cientos de millones de personas. Salvando las distancias, algo similar sucede con la marca protagonista de este reportaje, Bajaj, un fabricante de motocicletas indio con unas cifras de película en su país de origen (4 millones de unidades fabricadas al año, exportaciones en más de 100 países, 122.000 millones de euros facturados en 2023, más de 36.000 trabajadores, 21 millones de motos vendidas en todo el mundo…) que, sin embargo, todavía es una firma por acabar de conocer en Europa.

Pero su aterrizaje en nuestro continente -en España arrancó sus operaciones en octubre de 2024 de la mano de su distribuidor exclusivo, el Grupo Uma- está cogiendo ritmo, y ya dispone de un catálogo con tres modelos, todos ellos enfocados en el segmento de las motocicletas de marchas aptas para el carnet A1 o A2: la gama Pulsar, una naked disponible en cilindradas de 125cc y 400cc; y la Dominar 400, protagonista de este artículo, una moto con un enfoque particular, incluso poco habitual en nuestro mercado, pues se trata de una naked robusta y cómoda que equipa de serie numerosos elementos que permitirán a sus ocupantes acometer viajes, como si de una Tourer se tratase.

Con una presencia contundente, que incluso se asemeja a motos de mayor cilindrada, la Dominar 400 es muy accesible para todo tipo de usuarios, gracias a una altura del asiento de 800 mm y a una «cintura» estrecha que permite apoyar fácilmente los pies en el suelo. Su peso es de 187 kg así que las maniobras en parado no suponen mucho esfuerzo. La primera sensación que transmite a bordo y recorridos los primeros metros es la estupenda triangulación ergonómica que ofrece: la posición es comodísima, la forma del depósito acoge a la perfección las piernas (incluso de pilotos altos) y la espalda erguida, los brazos bien colocados y las rodillas pocos flexionadas convierten a la Dominar es una moto en la que no importa pasar mucho tiempo encima. El asiento, de textura cualitativa, ofrece un buen mullido. El pasajero dispone también de espaciosidad, con amplias asas para agarrarse y un pequeño respaldo lumbar de serie.

Se trata de una moto con una base naked, ideal para los desplazamientos diarios en la ciudad, pues es ligera, ágil y maniobrable. Una moto de planteamiento convencional, fácil de utilizar y sin artificios ni amplios despliegues tecnológicos (no ofrece modos de conducción, control de tracción, instrumentación TFT a color…) pero que se vuelve interesante precisamente por eso: tiene pinta de moto robusta y fiable, centrada en ofrecer confort y adaptación a cualquier situación, tanto en ciudad como fuera de ella…

Y es que cuenta con numerosos elementos que conforman un equipamiento de serie adaptado también a largos viajes: una cúpula parabrisas ahumada que, junto a los paramanos, ofrecen una protección aerodinámica correcta que mejora el confort cuando afrontamos altas velocidades; y protectores de motor con barras, de escape y de quilla, que siempre aportan un plus de seguridad ante posibles golpes o desperfectos en la carretera.

Equipa otros detalles llamativos, como una pequeña barra por encima de la instrumentación, ideal para instalar soportes de dispositivos móviles, y cerca se ubica un puerto de carga USB, para conectar su batería mientras viajamos. Las piñas son retroiluminadas, algo que no suele verse ni siquiera en motos de alta gama, y la instrumentación se compone de dos sencillas pantallas LCD: la principal sobre el manillar, con la información imprescindible (velocidad, las rpm, odómetro o nivel de combustible), y una auxiliar en el depósito que añade información como la marcha engranada o la hora. Una pequeña pegatina anti-arañazos, ubicada en la zona baja del depósito, se suma a la lista de pequeños pero prácticos detalles incluidos de serie. Cuenta además con iluminación LED en faro, intermitentes y piloto trasero, e incorpora de serie una parrilla portaequipajes, para instalar un top case.

La Dominar monta un propulsor monocilíndrico de 373cc (inyección electrónica, doble árbol de levas DOHC, refrigeración líquida) que entrega 40 CV de potencia a 8.800 rpm, y un par máximo de 35 Nm a 6.500 rpm. Debido a las alianzas de Bajaj con marcas como KTM, para fabricar sus motores de un cilindro, este modelo equipa la misma mecánica que la Duke 390, aunque con una configuración diferente, menos apretada, para ofrecer un tacto de conducción más suelto y agradable. Monta tres bujías que le ayudan a mejorar la combustión y a bajar el consumo.

Está muy lleno hasta la mitad del cuentavueltas, con una entrega lineal. Ofrece buenas recuperaciones casi en cualquier marcha, sin traqueteos en bajos, convirtiéndolo en un motor ideal para trayectos urbanos o interurbanos, pues podemos movernos entre coches o recibir aceleraciones progresivas casi sin usar el cambio de marchas. En la zona alta ofrece menos empuje y transmite algo de vibraciones en pies y manillar, pero alcanza fácilmente los 120 km/h e incluso se estira hasta los 150 km/h. Es un motor compacto, algo caluroso cuando llevamos un rato circulando en ciudad, pero de uso versátil y resuelto.

En la parte ciclo cuenta con un rígido chasis perimetral de acero, unido a una robusta horquilla invertida de 43 mm y monoamortiguador trasero, mientras el sistema de frenos ofrece un disco delantero de 320 mm y trasero de 230 mm, reforzado en ambos trenes por un ABS de doble canal. Ambas llantas son de 17 pulgadas, con medidas de 110/70 delante y 150/60 detrás. Ofrece un comportamiento muy neutro, de trazada precisa y ágiles cambios de dirección, con una dotación que trabaja priorizando el aplomo y el confort a bordo. Con una generosa batalla de 1.453 mm, ofrece también mucha estabilidad a altas velocidades.

La conducción en la Dominar 400 es realmente natural, en ciudad se siente muy manejable y se desenvuelve con soltura, y en carreteras secundarias o circunvalaciones todo fluye con armonía, sin pretensiones deportivas, pero sin prácticamente pegas porque está muy bien planteada. El cambio de marchas, de seis relaciones, es suavísimo y preciso, y el tacto de las manetas en el manillar es agradable. Los espejos retrovisores, bien ubicados, ofrecen una visibilidad ideal. El depósito de gasolina es grande, de 13 litros.

En definitiva, una moto para todo, que mezcla los conceptos naked y tourer, y que puede adaptarse con lógica a múltiples situaciones. Su hábitat más natural será la ciudad y extrarradio, pero si el usuario se lo propone, podrá alejarse y afrontar viajes de medio o largo recorrido con confort y estabilidad.

La Dominar 400 Euro 5+ ya está disponible en la red de más de 28 concesionarios oficiales. Su precio se mantiene en 4.699 €, sin incluir matriculación gratuita, una condición que cambia respecto a ediciones anteriores. Además, la moto cuenta con 5 años de garantía. Está disponible en tres colores: rojo, verde y negro.