El radar de tramo más largo de Madrid comienza a poner multas de 600 euros: fecha, dónde está y velocidad máxima permitida

Los radares son uno de los métodos que permiten que los conductores no circulen a altas velocidades, lo cual puede suponer peligros para él y para el resto de usuarios de la vía, además de agravar las consecuencias negativas en caso de accidente. Es por ellos que la velocidad se controla y regula en muchos puntos.

Madrid es uno de los muchos lugares de España en los que podemos encontrar radares de diferente tipo y, en pocos días, uno de ellos comenzará a ser efectivo respecto a sanciones si no se cumplen los niveles establecidos de velocidad. Se trata de un radar de tramo, en concreto el más largo de Madrid, por lo que controla los parámetros desde un punto a otro, sin que el tiempo en que se recorren sea inferior al estipulado, lo que indicaría que se va más rápido de lo permitido.

Como se indica desde la web del Ayuntamiento de Madrid, desde el pasado 15 de septiembre de 2023 se estrableció un «periodo de aviso de cuatro meses para garantizar que la información de la existencia de este nuevo control llega al mayor número de ciudadanos y potenciar así la labor de concienciación para mejorar la seguridad vial de la zona». Este dura hasta el 14 de enero, por tanto, el 15 de enero, lunes, es el día que comienzan a ser efectivas las multas del radar de tramo más largo de Madrid.

El mismo organismo define dónde se ubica este radar de tramo y qué zona abarca. La calle en la que se encuentra es la de Sinesio Delgado y la cámara de inicio, en sentido Ciudad Universitaria, se encuentra «a pocos metros de la glorieta Piedrafita de Cebrero, a la altura de la zona deportiva de Ganapanes. El final del tramo está localizado poco antes de la intersección con la avenida de Miraflores. El punto de control intermedio se ubica a la altura de la intersección con la calle Valdeverdeja». Este tramo abarca 1783 metros.

En sentido contrario, sentido Castellana, el tramo abarca 1800 metros, y el inicio se encuentra «poco después de la intersección de Sinesio Delgado con la avenida de Miraflores; el final se sitúa antes de llegar a la glorieta de Piedrafita de Cebrero. El punto de control intermedio se ha instalado en la intersección de Sinesio Delgado con la calle Doroteo Benache».

Con un periodo de cuatro meses en los de aviso para que la información del radar llegue al mayor número de personas, todos los vehículos que superen la velocidad máxima permitida, limitada a los 50 kilómetros por hora, serán notificados con una multa que puede ir de los 100 a los 600 euros y la pérdida aparejada de 2 y hasta 6 puntos en el carné de conducir.

Desde el ayuntamiento también recuerdan que, junto al de Sinesio Delgado, hay otros dos radares de este tipo, uno de doble sentido de la A-5, de 1.735 metros, y el de la avenida de Córdoba, exclusivamente en sentido salida, de 1.026 metros. El nuevo radar, además de ser el más largo de la ciudad, es el único que cuenta con controles de velocidad intermedios para captar los vehículos que entran por las vías de acceso.