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Trece años después de las primeras detenciones, el mayor escándalo de corrupción de Euskadi ha firmado su desenlace judicial. Tras estudiar durante meses los recursos de la Fiscalía y de las defensas, el Tribunal Supremo ha ratificado este martes las principales condenas impuestas por la Audiencia de Álava a exdirigentes del PNV en el 'caso De Miguel'. Con puntuales correcciones técnicas, el alto tribunal confirma una pena de 12 años y 4 meses de prisión para el cabecilla de la trama, el exdiputado foral Alfredo de Miguel, quien en todo caso cumplirá un máximo de 9 años. A Koldo Ochandiano se le imponen 7 años y medio, mientras que a Aitor Telleria se le condena a 5 años y un mes.
El Supremo avala el grueso del contenido de la sentencia emitida en diciembre de 2019 por la Audiencia de Álava. La Sala de lo Penal, presidida por el magistrado Manuel Marchena, considera que los tres principales acusados se prevalieron de sus cargos políticos en la ejecutiva del Araba buru batzar (ABB) para organizar una red en la que se adjudicaban contratos a cambio de comisiones ilegales. Para encubrir esos cobros, los acusados constituyeron, a través de testaferros, varias sociedades que facturaban servicios ficticios a los empresarios beneficiados.
Junto a los tres principales acusados, el Supremo también impone penas de prisión a otros responsables de la trama. En concreto, la sentencia condena a Josu Azkarraga e Iñaki San Juan a más de 4 años de cárcel cada uno como cooperadores de los delitos de prevaricación, malversación de fondos públicos, falsedad en documento mercantil y asociación ilícita. También deberá ingresar en prisión Javier Sánchez Robles, otro cualificado militante del PNV que ejerció de director de Juventud, quien deberá cumplir una pena de más de 7 años. También dos empresarios, Sergio Fernández y Jon Iñaki Etxaburu, han sido condenados a penas inferiores a los dos años.
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