'La sociedad de la nieve' de Bayona arrasa con doce Premios Goya

Los académicos han vencido sus prejuicios y apostado por Netflix frente al cine independiente. '20.000 especies de abejas', de Estíbaliz Urresola, partía como favorita con 15 nominaciones frente a las 13 de la de Bayona. Tuvo que conformarse con tres: dirección novel, guion original y actriz de reparto para Ane Gabarain. La cinta vasca ha costado 2 millones de euros frente a los 60 millones del quinto largometraje del director catalán, el primero en castellano desde su debut con 'El orfanato' hace 17 años. El libro de Pablo Vierci escrito a partir de los testimonios de los supervivientes inspira una odisea que ofrece espectáculo y recogimiento, emoción y un mensaje espiritual que apela a la bondad del ser humano.

La plataforma que ha cambiado las reglas en el negocio audiovisual le ha permitido a Bayona recrear la odisea de supervivencia de los Andes como nunca antes se había visto. Ni siquiera en la hollywoodiense '¡Viven!', rodada ya hace 30 años. 'La sociedad de la nieve', con un 90% de su capital estadounidense, es un fenómeno global que sigue llenando los cines nueve semanas después de su estreno gracias al tesón del cineasta catalán, que acompaña todas las proyecciones que puede.

El alud de estatuillas a lo largo de la noche fue imparable. Comenzó con las categorías técnicas: diseño de vestuario, efectos especiales, maquillaje y peluquería, actor revelación (Matías Recalt), montaje, dirección de fotografía, sonido, dirección artística, dirección de producción y música original. El autor de 'Lo imposible', de lágrima fácil, asistía emocionadísimo al aluvión de galardones.

'20.000 especies de abejas' recibió el premio a la dirección novel como estaba cantado. Ninguna otra de sus quince nominaciones resultaba tan merecida por la sensibilidad, la madurez y la inteligencia con las que la directora de Llodio escribió y dirigió su apología de la diferencia, un canto a la identidad y la tolerancia. «Cada vez somos más y tenemos más fuerza para decir #Seacabó», expresó la directora, que también llamó a parar «el genocidio de Gaza».

El Goya al mejor director fue para Bayona, la cuarta estatuilla (también la ha obtenido como novel) que colocará en su estantería. Una oportunidad perdida de recompensar a Víctor Erice, historia viva del cine español, cuya 'Cerrar los ojos' sirvió al menos para brindar su segundo Goya a José Coronado como actor de reparto por un filme crepuscular y magnífico. De Valladolid, Bayona volará a Los Ángeles para hacer campaña por los dos Oscar a los que aspira. Lo acompañará el bilbaíno Pablo Berger, ganador del Goya a película de animación con su deliciosa 'Robot Dreams'. «Larga vida al cine en los cines», defendió Berger, que obtuvo asimismo el Goya al mejor guion adaptado por convertir en dibujos el cómic de Sara Varon.

A los 50 años recién cumplidos, Malena Alterio merece el Goya como actriz protagonista por demostrar en 'Que nadie duerma' que, junto a su probada vis cómica posee un talento dramático heredado de una saga irrepetible. Pocas intérpretes hubieran sacado adelante un personaje tan excéntrico y escurridizo como la taxista surgida de la pluma de Juan José Millás. Lo de David Verdaguer en 'Saben aquell' es de otro planeta y el Goya al mejor actor protagonista así lo recompensa. No es que se mimetize en el humorista Eugenio en el 'biopic' de David Trueba: es Eugenio. Un premio de consolación para un filme triste y hermoso sobre un cómico empujado a serlo que retrata de paso la España de anteayer.

Cuesta reconocer a la madre coraje, defensora de un hijo etarra de 'Patria', en el personaje que Ane Gabarain borda en '20.000 especies de abejas', la tía de la pequeña protagonista, una apicultora un poco hippy, que utiliza el aguijón de las abejas con fines terapéuticos y se baña desnuda en el río. Una veterana de mil montajes teatrales que a sus 60 años obtiene su primer Goya a actriz de reparto.

Los Javis y Ana Belén echaron mano de Amaia y David Bisbal para versionar 'Mi gran noche' de Raphael al inicio de la fiesta. Buen rollo para comenzar tras una alfombra roja donde se vieron más pegatinas de stop a la guerra en Gaza y al comercio de armas que abanicos del #Seacabó. Con el presidente Pedro Sánchez y la vicepresidenta Yolanda Díaz en el patio de butacas, Ana Belén exigió enseguida «certezas de igualdad y condenar todos los abusos y la violencia sexual», mientras Los Javis recordaron a las víctimas «que no están solas».

Fue una ceremonia fluida, en la que los premios se sucedían una tras otro y en la que no podía faltar el homenaje a Concha Velasco, hija pródiga de Valladolid, con un número musical de Ana Belén y Los Javis, que también tuvieron un emocionante sketch desgranando sus recuerdos personales en un sofá rematado con la aparición de Pedro Almodóvar y la aparición de cuatro protagonistas de 'Todo sobre mi madre': Penélopez Cruz, Marisa Paredes, Antonia San Juan y Cecilia Roth. «Amar el cine español es una de las mejores formas de amar nuestro país», acertaron a definir los directores de 'La Mesías', que también demostraron ser unos estupendos maestros de ceremonias. El tono osciló entre lo petardo y lo reivindicativo pero sin que la cosa quedara agria y violenta.