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La Audiencia Provincial de Salamanca ha condenado a tres años de prisión a los dos gendarmes franceses que en el verano del año 2017 fueron interceptados en Fuentes de Oñoro (Salamanca) al cruzar la frontera entre Portugal y España con explosivos en una furgoneta, entre otros elementos, cajas, 67 granadas de entrenamiento de diferentes características, 36 fumígenos o bombas de humo con espoletas de diferentes características, 9 detonadores de media carga, 36 espoletas de diferentes características, 4 filtros de partículas y polivalentes y un lanzagranadas, así como 2 máscaras antigás.
Los detenidos eran miembros en activo del cuerpo policial de la Gendarmería francesa -estaban de vacaciones-. Como detalla la sentencia en los hechos probados, los dos gendarmes concertaron con un socio portugués la constitución de una sociedad dedicada a la formación y cohesión de grupos, organización de actividades extremas y sensibilización contra el terrorismo, centrada en ejercicios físicos y de autosuperación, llevada a cabo en campos de entrenamiento preparados al efecto. A tal fin, en uno o varios viajes a Portugal durante el verano de 2017 transportaron a dicho país una serie de materiales, fundamentalmente elementos explosivos, granadas de entrenamiento y otros que luego se dirán, que previamente habían sustraído de los depósitos y armerías del Centro de lnstrucción de la Gendarmeríade Beynts, sito en la localidad de lblines, cercano a Gendarmería de París-Versalles donde ambos prestaban sus servicios, sin conocimiento de tal sustracción de las autoridades francesas.
Al llegar a Portugal, los dos gendarmes comprobaron que la sociedad formada con el socio francoportugués no llegaba a buen fin porque este último, que era quien debía aportar, además del terreno rural como sede de entrenamiento, el dinerario a la sociedad, desistieron finalmente de hacerlo, los dos acusados decidieron reintegrar el material al sitio de donde lo habían obtenido.
Y es ahí cuando fueron pillados por los agentes de la Guardia Civil en el punto kilométrico 351.300 de la Autovía A-620, término de Fuentes de Oñoro (Salamanca).
Así, en el fallo de la sentencia se condena a los acusados a la pena de 3 años de prisión; y comiso del material intervenido, al que se dará el destino legal, salvo que se estime su devolución al Gobierno de la República francesa o sea reclamado por el mismo.
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La Voz de Cádiz
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