El encanto de Salamanca, ambientado con el ritmo de músicos callejeros
Juan María y Antonio Moreno, guitarrista y violonchelista muestran sus versiones a un público salmantino muy generoso
Turistas y estudiantes inundan las calles de Salamanca durante todo el año. Una ciudad con una gran afluencia debido a su historia, su gastronomía, su cultura y sobre todo, su ambiente. Un medio en el que las personas recorren sus calles ante la atenta miranda de sus grandes monumentos, acompañados de un eco que se transmite por los rincones más visibles de la capital. Más concretamente, se trata de los artistas callejeros, esos talentosos músicos que dan un toque especial a Salamanca. Juan María y Antonio Moreno, guitarrista y violonchelista muestran sus versiones a un público salmantino muy generoso, que disfruta y valora la labor que están haciendo. Ambos de edades diferentes pero con un objetivo común, «hacer que la gente se quede y pase un buen rato diferente».
Músicos callejeros
Antonio Moreno Pérez
El eco de la calle compañía se inunda de diferentes sonidos de artistas que comparten su talento frente a la Casa de las Conchas y las Torres de la Clerecía. En este caso, Antonio Moreno Pérez, músico, capta la atención de salmantinos y turistas que paseas por el casco histórico de la ciudad. Las canciones versionadas por Antonio pueden escucharse en los alrededores de la Plaza Mayor, pues son los sitios con mayor afluencia para que la gente disfrute del sonido de su violonchelo.
El joven, pese a realizar sus estudios en Madrid, veranea en pueblo cercano a Salamanca y aprovecha las vacaciones de verano para tocar en la capital frente a las miradas de un público «muy generoso». Dar el primer paso siempre es complicado, pero Antonio se lo tomó con total normalidad, «practico muchísimo y pensé en que eso que hago en casa podía hacerlo en la calle y enseñárselo a la gente». Antonio lleva cinco años tocando el violonchelo y 10 el piano, «lo más complicado es empezar pero para llamar la atención aprovecho para tocar mi mejor pieza». Su género es el clásico y la canción que más disfruta en la Tarantella de William Henry Squire.
Los salmantinos saben valorar el talento y desde luego que Antonio merece ser escuchado. Confiesa que en Salamanca el público es muy generoso y dependiendo del día gana más o menos dinero, «ayer fue mi mejor día con 100 euros pero suele oscilar entre los 30 y los 50».
Juan María
Música de los 80 ante la mirada de la Catedral Nueva, una experiencia que solo quienes se encuentren a Juan María podrán disfrutar. Este músico capta la atención de salmantinos y turistas de una manera muy talentosa a la par de original. El eco de las calles del casco histórico te hará llegar la música de este artista callejero y una vez te encuentres con él, querrás quedarte a escucharlo.
Juan María es un extremeño al que le encanta Salamanca y desde el año 2016 inunda las calles de la ciudad de un sonido nuevo, diferente y envolvente. Su especialidad es la música de los 80, «hago canciones de esa época y las versiono al flamenco». En un primer momento siempre cuesta captar las miradas de quienes pasan por delante de estos artistas pero Juan lo hace enseguida, «comienzo con canciones conocidas, la gente las escucha, las reconoce y ya se queda». Comenta lo agradecido que se siente con la ciudad, «el público de Salamanca es buenísimo y muy generoso, dependiendo del día gano más o menos».
Este artista aprovecha los meses de verano para venir a tocar a la capital charra, «me gusta mucho venir aquí porque hay mucho turismo, el resto del año me quedo en casa». Una época del año en la que Juan María comparte su talento con la ciudadanía más allá de las ventanas de su casa, donde ensaya, «me encanta hacer música, ahora mismo solo me dedico a ello». Juan, después de más de seis años continúa con la misma ilusión y las mismas ganas que el primer día y pese a haber tocado en más lugares, «Salamanca para mí es un lugar muy especial».