Los forenses aseguran que las lesiones de Yess María evidenciaban «una gran violencia»

La segunda jornada del juicio por la muerte de Yess María Pérez Quejada el día 5 de enero de 2023 en Santa Marta de Tormes arrancó esta mañana del martes, 24 de septiembre, con la declaración de los médicos forenses que participaron en la elaboración de las pruebas periciales.

La médica que acudió al levantamiento del cadáver relató como encontraron el cuerpo en el baño, «con numerosos golpes por casi todo el cuerpo, pero en especial en la cara, el torso y las extremidades superiores», aseguró.

Para explicar mejor su trabajo, aportaron varias fotografías que se proyectaron en la sala generando estupor entre los presentes y especialmente entre los familiares de Yess María. En ellas podían apreciarse los hematomas en varias zonas y el fiscal reparó de forma especial en las marcas de la cara, entre las que podía verse la silueta de la suela de una zapatilla «que se corresponde con la de una zapatilla que me mostró la Guardia Civil y que al parecer llevaba el acusado, M.G.M.», confirmó la forense. Además aseguro que un pisotón o patada en la cabeza era el motivo de la lesión cerebral que muy probablemente le causó la muerte.

Por otra parte, y seguían proyectándose duras imágenes del cuerpo y de algunas de las partes ya extraídas tras realizar la autopsia, en las que podían apreciarse el resultado de los golpes «que tuvieron que propinarse con un gran violencia para generar el daño causado».

Durante su explicación, la forense también destacó que el tipo de lesiones y los lugares del cuerpo en los que se habían producido indicaban que se habían llevado a cabo mientras la mujer estaba tumbada en el suelo, insistiendo en que se hizo «con fuerza y ensañamiento». Una violencia que también afirmó que era evidente al ver hasta donde llegaban las gotas de sangre teniendo en cuenta el lugar de la sala de la casa donde estuvo atada Yess María.

Otro aspecto esclarecedor de la declaración de la forense fue la confirmación de que la gran cantidad de agua que tenia en las vías respiratorias y los pulmones hacía presuponer «que fue sumergida en el agua e intentó respirar ingiriendo gran cantidad de agua».

Por otra parte, la forense destacó los altos porcentajes de alcohol en sangre que presentaba el acusado. «Una tasa de 4 gramos que para algunas personas supondría casi un como etílico», aunque explicó que el consumo combinado de alcohol y drogas suele incrementar estas tasas y según consta en el informe, D.G.M. había consumido también cocaína, cannabis, anfetamina y MDMA.

Sin embargo, el informe también señala que el acusado, que tenía los nudillos hinchados, estaba totalmente capacitado y era consciente de lo que estaba sucediendo, «como podría demostrar el hecho de que tras realizar sus actos violentos recogió y limpio la casa intentado eliminar rastros y huellas».

Tras las preguntas del fiscal, y respondiendo al abogado de la acusación, los forenses confirmaron que la hora de la muerte podría situarse alrededor de las tres de la mañana«. Pero fue al responder a la abogada de la defensa cuando confirmaron que pese a que la lesión cerebral con motivo del pisotón en la cara habría causado su fallecimiento, la muerte se produjo por ahogamiento.

Además, ante la insistencia de la abogada defensora sobre las prácticas realizadas para determinar que el acusado sabía lo que había hecho y era consciente de sus actos pese a haber consumido alcohol y drogas, los forenses aseguraron que «la forma de expresarse, las respuestas que daba a sus preguntas, su actitud y su presencia evidenciaban que los efectos del alcohol y la drogas no le impedían tener conciencia de lo que había sucedido».

Además, ante el intento de la abogada defensora de vincular la actuación del acusado a la ingesta de gran cantidad de drogas y alcohol, y el tipo y efectos de esas sustancias, informaron de que el hecho de que el acusado fuese consumidor habitual también puede hacer que los efectos fueran menores y que los efectos no son iguales en todas las personas. Y también insistieron en que aunque los resultados de los análisis son importantes, «lo que más información aporta es la exploración que se realiza a la persona, y en ella fue evidente que la capacidad cognitiva del acusado era plena por sus respuestas y su actitud».

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