Los hábitos de lectura de los jóvenes en Salamanca: de la fantasía al manga

La lectura no pasa de moda, evoluciona y se amplía. El perfil lector en Salamanca es muy variado. El perfil adulto abarca una lectura mucho más amplia y polivalente.

Macarena, encargada de la librería Santos Ochoa de Gran Vía, afirma que el público y los gustos juveniles también son muy variados pero sobretodo se consume mucha fantasía. Gracias a booktok, las editoriales aprovechan para publicar ediciones especiales que mandar a perfiles que hagan reseñas en redes sociales ya que es un impulsor bastante grande para la lectura juvenil. Otro de los géneros que lleva años despuntado es el manga, pasando de ocupar una única balda en la librería a ocupar tres estanterías completas.

Ha habido un cambio en la forma de escritura fantástica, los autores clásicos tienen una escritura más de nicho y descriptiva, mientras las nuevas generaciones son más dinámicas y no engloban solo un género, sino que en una misma historia se pueden encontrar diferentes temáticas que atraen más y facilitan esa primera de contacto con el género a los lectores. Además, otro de los factores que atraen más de este tipo de literatura, es el papel y la importancia que tienen las mujeres en la trama.

Todos estos ingredientes, las redes sociales, la forma de escribir y la aparición de un nuevo género literario denominado new adult, se ha creado un espacio donde los jovenes se ven más incluidos.

Desde la librería comentan que se ha notado el cambio, ya que antes se consumía mucho romance adolescente, que se siguen consumiendo pero en menor medida, y ahora ha habido un corte, un punto de inflexión y gracias a sagas como Una corte de rosas y espinas de Sarah J. Maas o Alas de Hierro de Rebeca Yarros, la fantasía ha tomado las riendas del consumo literario entre los jovenes.

El bono cultural es un privilegio que los jovenes que cumplen 18 años pueden utilizar. 400 euros para gastar en cultura, y desde la librería lo tienen claro, «vienen con ilusión a comprar libros de todo tipo, incluso clásicos, pero no los que les pueden mandar desde los centros educativos, vienen a por libros para su ocio» afirma la encargada.

Aunque el libro electrónico tiene gran importancia y muchos son los usuarios que lo eligen como su método de lectura, el libro el papel no pierde protagonismo. Y es que las ediciones especiales, o incluso los rituales entorno a la lectura que mucha gente ha adoptado con el paso del tiempo hacen que estos, no cambien el formato tradicional.

La lectura sigue ganando terreno como una de las principales formas de ocio en España. Así lo demuestra el último Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros 2024 donde por primera vez, el 65,5 % de la población española afirma leer libros en su tiempo libre, lo que supone un incremento de 5,8 puntos porcentuales respecto a 2017.

Esta cifra que no solo reafirma tendencia iniciada tras la pandemia, sino que también evidencia un cambio cultural sostenido y transversal.

En españa el perfil lector es muy claro, una mujer joven con estudios universitarios que reside en un entorno urbano, y es que en 2024 el 71,7% de las mujeres han leído por ocio, frente el 59% de los hombres. Es decir, son 12 puntos de diferencia entre ambos sexos, la más alta hasta la fecha.

Pero Castilla y León, se encuentra por debajo de la media nacional, y es que aunque con respecto a 2023, los lectores han aumentado, en 1,6 puntos, los lectores siguen por debajo de la media nacional, con un 63,2%.

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