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Una usuaria valida su tarjeta para usar el transporte por carretera. JCyL

Las líneas del bus gratuito en Salamanca donde más viajes se han hecho: Buscyl flojea en los pueblos

El primer balance confirma a la provincia como la que más ha usado la tarjeta, pero centra en el metropolitano y la línea de Zamora la gran parte de la demanda, mientras en el rural no termina de arrancar

Félix Oliva

Salamanca

Domingo, 26 de octubre 2025, 11:36

La puesta en marcha del bus gratuito para los empadronados en Castilla y León se ha saldado con una gran respuesta de los usuarios, que han superado ya el millón de viajes realizados con la tarjeta, física o digital, desde que empezó a funcionar el sistema. El resultado es que Buscyl reina en Salamanca, la provincia donde más viajes se hacen

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Según la Junta, la cifra de viajes desde su implantación alcanzando 1.098.437 hasta el pasado 15 de octubre, prácticamente un millón para los usuarios generales y el resto para los menores de 15 años, que fueron los que lo estrenaron el pasado verano. Todo, a pesar de todas las pegas iniciales del despliegue.

La implantación del nuevo sistema de transporte gratuito para personas empadronadas mediante la tarjeta Buscyl, que comenzó el 1 de julio con los menores de 15 años, se consolida con buenos datos: 103.142 viajes en las líneas de autobús del transporte autonómico. El mes de septiembre fue el de mayor número de viajes con 50.709. Mientras que para el resto de la población, la cifra alcanza los 995.295 viajes entre el 1 de septiembre y el 15 de octubre.

Por provincias la distribución indica que hay tres provincias privilegiadas y que destacan aquellas que tienen transporte metropolitano. El reparto es el siguiente: Ávila (3.538), Burgos (13.168), León (153.366), Palencia (22.372), Salamanca (449.855), Segovia (60.766), Soria (2.139), Valladolid (385.788) y Zamora (7.445).

El transporte metropolitano aglutina cuatro de cada cinco viajes, concretamente 839.331 en las 83 rutas de las provincias de Burgos, León, Salamanca, Segovia y Valladolid. Eso supone que el transporte de proximidad a las capitales acapara casi 8 de cada 10 viajes; el reverso es que la demanda es mucho menor en el transporte rural donde la demanda es menor, muchos pueblos carecen de servicio y Buscyl no termina de despegar.

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Una de las claves adicionales es el refuerzo de algunas línes con mucha demanda, como ha sido la Zamora-Salamanca, que tuvo que ampliar plazas; y también en los metropolitanos de Salamanca y Valladolid.

En el lado del debe, los problemas de alta demanda, la falta de frecuencias adecuadas en conexiones como la Salamanca-Guijuelo-Béjar, el hecho de que muchas tarjetas físicas todavía no hayan llegado o que la tarjeta no sea compatible con los portales web de compra de billetes y abonos de las compañías, como en el caso de la línea Salamanca-Valladolid.

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Cómo se pide y cómo se usa

La tarjeta Buscyl digital ya está a disposición de 450.000 usuarios, tras haberse dado ya respuesta a nueve de cada 10 solicitudes recibidas. En Salamanca han llegado cuatro de cada cinco solicitadas.

La forma más rápida y sencilla de solicitarla es por internet, a través de la web www.buscyl.es, rellenando un breve formulario con los datos personales para que la Junta compruebe el empadronamiento mediante un sistema de interoperabilidad establecido con el INE. De esta manera, el usuario recibirá la tarjeta con mayor agilidad que en la tramitación presencial.

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También es posible realizar la gestión en formato físico de manera presencial, aunque se recomienda la vía online para agilizar los plazos y facilitar el acceso al servicio. Puede solicitarla cualquier persona empadronada en Castilla y León. La tarjeta es personal e intrasferible y está vinculada al DNI. Para menores sin documento de identidad bastará con el libro de familia.

La Tarjeta Buscyl puede recibirse en formato físico o digital para llevar directamente en el teléfono móvil. Su funcionamiento es sencillo: basta con mostrarla al conductor al acceder al autobús, del mismo modo que se hacía anteriormente con los bonos de transporte, que por el momento siguen conviviendo con la Tarjeta Buscyl.

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