Las cuatro muertes sin aclarar en Salamanca que se van al parón judicial de agosto

Este día 1 de agosto ha empezado el mes que, por ley, es inhábil en la Administración de Justicia tal y como recoge el art.183 de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Eso se traduce en una paralización casi total de las actuaciones judiciales, excepto las que se declaren urgentes. A este parón del verano llega Salamanca con importantes casos abiertos.

Se trata del atropello ferroviario de Moriscos, la aparición de un joven muerto en una finca de Ciudad Rodrigo, el apuñalamiento mortal en una zona de bares de la capital y dos ahogamietos: el de un joven en el río Tormes en Alba y otro en el Águeda en Ciudad Rodrigo.

Estos dos últimos no tienen ya recorrido judicial. Y el caso de la profesora arrollada por un coche en un paso de peatones irá a juicio penal tras el verano, en octubre, y parece que se resolverá con un acuerdo. Así están el resto a la llegada del mes de agosto.

El último y todavía latente es el que se llevó por delante la vida de dos personas que murieron arrolladas por el tren Alvia procedente de Madrid el día 20 de julio por la noche. El tren se detuvo poco después de superar el apeadero de Moriscos, donde posteriormente se supo que se había producido el impacto y que, aunque inicialmente parecía que había una persona implicada, era dos las fallecidas.

Durante el domingo y el lunes se conocieron más detalles. Los fallecidos eran pareja, figuraban en el sistema de vigilancia de casos de violencia de género y él tenía denuncias previas. No obstante, todavía quedan algunas lagunas y certerzas sobre el caso.

Según fuentes judiciales, el asunto sigue en el juzgado número 1 de Instrucción de Salamanca ya que su titular no vió motivos para trasladarlo al especializado en casos de violencia. Tampoco indicios de delito.

La investigación la inició la Guardia Civil y, en estos momentos, no se está tomando declaración a nadie para incoporarlo a la investigación o al atestado; lo que pudo decir el maquinista sobre un forcejeo entre dos personas no ha tenido peso en el caso.

Es el juzgado que asumió el caso el que lleva ahora la batuta, pero según las fuentes consultadas no parece fácil que alguien aporte algún testimonio especialmente relevante ni se le ha tomado declaración a nadie en el juzgado. Y el juez tomó la decisión de asumir el caso, sin apreciar delito, con los datos que aportó la investigación policial.

Según fuentes judiciales, el caso podría ir camino de archivarse. La responsabilidad penal está extinguida al haber fallecido los dos implicados directos, y las posibilidades de que aparezca alguna evidencia que permita saber qué ha pasado es reducida. En el ámbito judicial se buscan responsables, no respuestas para la ciudadanía.

La madrugada del miércoles 16 de julio fallecía en plena calle un varón tras ser apuñalado por otro a la puerta de un local de ocio en una conocida zona de bares de Salamanca. El crimen tenía lugar a las 3.58 horas en la calle Bordadores.

La Policía Nacional, que se ocupó del asunto, confirmó que se trata de agresión por arma blanca a un varón de 42 años que fue trasladado muy grave en UVI al hospital de Salamanca con una herida cercana al corazón y falleció poco después.

Según detalló la Subdelegación de Gobierno, la víctima era un varón de origen senegalés de 42 años. La Policía Nacional, en colaboración con la Policía Local, detuvo al presunto autor de los hechos, un hombre de nacionalidad brasileña y portero del local de ocio a cuya puerta se produjo el apuñalamiento mortal. El arma del presunto homicidio -una navaja- apareció en una papelera cercana al lugar, siendo inmeditamente intervenida.

El juzgado número 1 de Instrucción ordenaba la entrada en prisión provisional, comunicada, sin fianza para el hombre detenido; el resultado de las diligencias que se practiquen a lo largo de la instrucción determinará el delito que finalmente se le imputen, pero está abierta por homicidio. La causa va a ser instruida por el Juzgado de Instrucción número 4.

El pasado 24 de enero aparecía en una finca del término de Ciudad Rodrigo el cadáver de un joven de 20 años. Según las primeras averiguaciones de la Guardia Civil, la muerte se produjo por aplastamiento; al parecer le cayó encima un gran bloque de alpacas de paja. Sin embargo, pronto el caso giró hacia un posible homicidio.

Al día siguiente, la Guardia Civil confirmaba que pasaba a investigar como muerte con indicios de violencia las circunstancias en las que ha aparecido el cadáver de un joven muerto en una finca de Sanjuanejo. El juzgado decretaba el secreto de las actuaciones y el instituto armado confirmaba la investigación por muerte violenta, no accidental.

También se incorporaba la UCO a la investigación del caso, sumándose a la unidad de la Policía Judicial de la Guardia Civil desplegada «en su totalidad» trabajando en este caso, que se ha calificado como «importante» y que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado «quieren resolver cuanto antes».

Según fuentes consultadas por este medio, el cambio de rumbo del caso tenía que ver con el hecho de que el cuerpo haya aparecido con algunas heridas cuyo origen se investiga y que se analizaron en la autopsia. Aunque se interrogó a varias personas, no se ha sabido más y aparentemente no tiene progresos. Según fuentes de la Guardia Civil, la investigación sigue abierta más de medio año después.

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