El 84% de las excedencias por cuidado de hijos en Salamanca son tramitadas por mujeres
A pesar de que los permisos para el cuidado del menor tienen un reparto igualitario entre progenitories, la brecha de género en excedencias es muy notable
Cuatro años desde que se igualaron los permisos laborales por nacimiento de hijo para madres y padres: 16 semanas cada uno, seis obligatorias tras el parto y el resto fraccionables. Este 30 de julio se publicaba el decreto por el que se amplía el permiso de nacimiento a 17 semanas para cada progenitor junto a la remuneración de dos semanas del permiso por cuidado de hijo hasta que cumpla los ocho años. Con esta medida se pretende promover la corresponsabilidad en la crianza de los hijos y acabar con la penalización laboral de las mujeres. Pero, ¿qué efecto han tenido estas medidas en Salamanca?
Publicidad
Noticia relacionada
Menos madres y de más edad: las claves que explican la natalidad en Salamanca
Durante el año 2024 -tres años después de la entrada en vigor de las 16 semanas- esta medida se tradujo en un total de 2.507 prestaciones por nacimiento y cuidado de menor en Salamanca, según datos de la Seguridad Social. La distribución entre progenitores muestra un equilibrio entre ambos progenitores: 1.236 correspondieron al primer progenitor -generalmente la madre- y 1.271 al segundo progenitor -generalmente el padre-. Aunque el número de prestaciones está bastante igualado, hay ligeramente más padres que madres que disfrutaron de este permiso.
Este 'sorpasso' se puede deber a que el desempleo de las mujeres es más elevado por lo que no cuentan con esa ayuda económica que se concede a los trabajadores o bien tienen contratos temporales que no renuevan durante el embarazo, quedando sin cobertura. Además, los datos cuentan cada periodo semanal del permiso como un expediente distinto, en el caso de que se fraccione el permiso, se contabiliza cada vez, lo que hace que el número de prestaciones para los padres parezca mayor.
Un panorama aún desproporcionado
El reparto casi paritario en Salamanca refleja la consolidación del permiso de paternidad como un derecho plenamente asumido por los padres. Sin embargo, el uso corresponsable -es decir, fraccionado y alternado con la madre para prolongar el cuidado del bebé- sigue siendo minoritario a nivel nacional, y los estudios apuntan a que solo dos de cada diez hombres lo ejercen de esta forma.
De hecho, en 2024 se tramitaron en Salamanca 323 excedencias, de las cuales 274 fueron solicitadas por mujeres y solo 49 por hombres. Pese a que esta cifra supone un ligero incremento del 6,6% respecto a 2023, la brecha de género sigue siendo abrumadora, ya que más del 84% de estas licencias siguen en manos femeninas. Unos datos que reflejan, aún hoy, una desigualdad latente en la distribución de las responsabilidades familiares. Esto tiene un efecto directo en el impacto en las carreras profesionales de la mujer, que acaba contibuyendo a una desigualdad de ingresos y una menor posibilidad de ascenso laboral.
Publicidad
En cuanto a la duración media de los permisos para el primer progenitor en casos de maternidad biológica se situó en 106,33 días en la modalidad contributiva, ligeramente por debajo de las 112,6 jornadas que registran de media las mujeres en el conjunto de España. La modalidad no contributiva tuvo escasa incidencia, con solo un proceso en la provincia y 42 días de duración media.
84% de las excedencias tramitadas
fueron solicitadas por mujeres
Los sindicatos valoran positivamente el avance, pero advierten de que aún existen barreras culturales y laborales para que los hombres asuman en solitario el cuidado del recién nacido. La precariedad, la temporalidad o el miedo a perder oportunidades profesionales influyen en que muchos progenitores masculinos opten por tomar las 17 semanas de forma continuada junto a la madre, en lugar de turnarse.
Publicidad
En cualquier caso, las cifras de Salamanca confirman que el permiso de paternidad se ha normalizado y es ejercido por la gran mayoría de padres, algo impensable hace dos décadas, cuando su duración era de apenas dos días. El reto ahora, según coinciden expertos y sindicatos, es que este avance en igualdad en los permisos remunerados se traslade también a otros ámbitos de la conciliación, como las excedencias y la distribución real del tiempo en la crianza.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión