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F. Oliva
Miércoles, 22 de febrero 2023, 16:04
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La Guardia Civil de Salamanca ya tiene en sus garajes las dos primeras unidades de las primeras motos eléctricas que se incorporan al parque móvil en la larga historia de la benemérita. Se trata de dos vehículos que han generado cierta controversia porque las van a usar los agentes del Seprona y hay dudas sobre su autonomía y los problemas para recargar sus baterías.
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha presentado los nuevos vehículos adquiridos por el Gobierno de España para renovar el parque móvil de la Guardia Civil en Castilla y León. Son 205 vehículos que se suman a los 250 que llegaron hace unos meses, con una apuesta destacada por los vehículos eléctricos.
De los 205 nuevos vehículos para la Guardia Civil, 27 coches y 22 motocicletas son eléctricos, en este último caso, todas las que se incoporan al parque. Está previsto que todas las comandancias de Castilla y León reciban entre dos y cuatro de estos vehículos cero emisiones, así como al menos dos motos eléctricas. Según la subdelegación, a Salamanca llevan 21 turismos y dos motocicletas, estas dos eléctricas.
145son los kilómetros de autonomía que homologan las nuevas motos del Seprona con una sola recarga de batería
La motocicleta en cuestión es el modelo Zero FX de Zero Motorcycles, es un vehículo de tipo todoterreno y está destinada a los agentes que patrullan en el campo. Según el fabricante, tienene 44 CV y su velocidad máxima es de 140 km/h, características acordes a otras motocicletas todoterreno con motores de combustión, pero su autonomía máxima es de 145 kilómetros con una batería, que tarda en recargarse casi 10 horas.
Aquí es donde surgen las dudas. La autonomía y las necesidades de recarga han provocado las críticas de la asociación profesional Independientes de la Guardia Civil (IGC) que asegura que, según figura en las caracteristicas técnicas, las motos dispondrían de una autonomía de tan solo cuatro horas, con un tope de 143 kilómetros en ciudad y de 63 en carretera, «insuficiente para, por ejemplo, los servicios que realiza el Seprona, que se desarrollan mayoritariamente en lugares aislados como es el campo o que pudieran prolongarse», recuerdan.
Según la IGC, los vehículos eléctricos disponibles hasta ahora han estado parados por falta de punto de recarga en los cuarteles. Sin embargo, la subdelegación afirma que, a fin de incrementar las posibilidades de recarga, el Ministerio ha dotado a la mayoría de las unidades donde prestan servicio estos vehículos de puntos de recarga. Además, trabaja ya para ampliar esta red de recarga.
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