Las claves de los PGE para Salamanca: las ideas de siempre y un proyecto que renace

Las inversiones del Gobierno en el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023 crecerán en Salamanca un 20% hasta superar los 64 millones de euros, pero ¿es este un motivo para el optimismo? El aumento de partidas está ahí, aunque la provincia representa el 6,7% del total de inversiones de ministerios y sector público, sólo mejor que Segovia y Ávila.

No obstante, en unos presupuestos calificados de muy sociales, la subida de las pensiones, el aumento de salarios de los funcionarios, de la cuantía del ingreso mínimo vital o la rebaja de los impuestos a los que declaran menos de 20.000 eros beneficiará a muchos salmantinos. Pero en el capítulo inversiones aparecen casi los mismos proyectos un año tras otro, sin avances, con las mismas o similares partidas (incluso menores) y muchas incógnitas sobre la ejecución, aunque hay algunas excepciones.

En la lista de los principales proyectos los hay eternos, que repiten una y otra vez cada vez que hay PGE. Se han ido cayendo algunos como la rehabilitación de las murallas de Ciudad Rodrigo o los regadíos ya finalizados, pero hay otros que no avanzan, incluso algunos ni siquiera arrancan. Ahí están la reforma de la Audiencia Provincial, la sustitución de la rotonda de Buenos Aires, la tercera sede del Centro de la Memoria… que no fraguan. La electrificación que no logra poner fin a sus retrasos. O las inversiones reiteradas, aunque necesarias, en el Centro del Láser, las instalaciones nucleares de Juzbado, la actuaciones en patrimonio de la Usal… Poco o nada hay que sea nuevo. Entre las excepciones, las depuradora de El Payo y El Sahugo y el colector de El Bodón, a lo que se dedica tres millones de euros, y que son proyectos 'de estreno'.

Con todo, este año hay una gran excepción, el nuevo centro del Irnasa, que recibe por fin una partida suficiente para despegar, una de las mayores inversiones individuales con sus 6 millones de euros. Cuenta con proyectos y permisos, pero no hay obras reales, así que habrá que estar muy pendientes porque es otra de esas apuestas que se ha atascado en el tiempo. Estas son las principales inversiones y su situación.

La sociedad estatal de participaciones industriales (Sepi) concentra la mayor parte de sus inversiones en Castilla y León en los presupuestos de 2023 en la provincia de Salamanca, con 15 millones de euros de los 20,9 previstos. Los 15 millones a la provincia charra se destinan a la fábrica de combustible de Juzbado, donde destaca la partida de 5,6 millones al centro de tecnología y mantenimiento de equipos y 5,3 a instalaciones técnicas y maquinaria. 

Las inversiones ferroviarias contemplan 10,07 millones para la electrificación de la línea convencional entre Medina del Campo (Valladolid)-Fuentes de Oñoro (Salamanca) cuyos tramos en la provincia se están reformando desde hace años, con retrasos en la ejecución. En teoría, 2023 será el último año que tenga asignación, pero será difícil que las obras estén terminadas el año que viene.

Una parcela con actuaciones pendientes desde hace tiempo, con obras abiertas en Santa Marta de Tormes (519.000 euros) que tendrán su última partida en 2024, otro medio millón de euros para terminar, y previstas en Ciudad Rodrigo (100.000 euros). Interior presupuesta también partidas significativas en el marco del Plan de transición energética que implica obras por valor de 20,8 millones de euros.

La reforma de la sede judicial de Gran Vía lleva años pendiente y con retrasos, el último, por los problemas para arreglar la sede provisional elegida, en Torres Villarroel. En 2023, el Ministerio destinará otros 509.000 euros a la remodelación de las instalaciones. No obstante, poco se va a poder gastar si no arrancan las obras. Para el próximo año no hay muchas esperanzas a pesar de que los PGE califican el proyecto como necesario para mejorar la atención al ciudadano. La gran inversión se va a 2024 (2,5 millones de los 8,2 totales), pero ha sido frecuente que las partidas tengan que postergarse año tras año.

La conexión de autovías al Sur de la capital lleva años esperando su momento. Llegó a haber proyecto para eliminar la bajada a la rotonda en Buenos Aires, donde confluyen dos autovías y carreteras, con un intenso tráfico. La idea era construir un viaducto de 40 millones de euros, pero se renunció a ello por la presencia de grabados rupestres en el punto previsto para el puente. En su lugar, se ha optado por una solución local más sencilla, 15 millones de euros en total. Para 2023, están previstos dos millones (como el año pasado), aunque no se conoce con detalle el proyecto.

La nueva sede del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca contará con su partida más grande, seis millones de euros, en los presupuestos generales del Estado de 2023. Se trata el ejercicio en el que se producirá su mayor avance si atendemos al presupuesto. No obstante, hay que recordar que en 2021 contaba con un millón, más 1,5 en 2022, y que, hoy por hoy, no se ha hecho nada.

La construcción de la tercera sede del Centro de la Memoria, en Tejares, tiene los mismos 300.000 euros del año pasado y su inversión fuerte se demora un año más, a partir de 2024, según el nuevo cronograma, aunque cada año se posterga un ejercicio por falta de avances.

El Consorcio para el Diseño, Construcción, Equipamiento y Explotación del Centro de Láseres Pulsados Ultracortos Ultraintensos recibe una inversión de 2.249.000 euros en los presupuestos estatales para el próximo año, lo que supone 1,3 millones más que en los de este año.

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