El pueblo de Salamanca que contará con un moderno helipuerto privado en el verano de 2026

El pueblo de Aldeatejada, ubicado en el alfoz de la capital de Salamanca y uno de las que más ha crecido en población y servicios en las últimas décadas en la provincia, contará con un helipuerto próximanente. Las obras, que ya han comenzando, se están desarrollando en la parcela 11 del polígono 3 en Porquerizos y se prevé que entre en funcionamiento entre los meses de julio y agosto de 2026.

La parcela en la que se ha proyectado el hangar y sus servicios complementarios se encuentra ubicada al suroeste del núcleo urbano de Aldeatejada, a una distancia aproximada de 4 kilómetros y se accede a ella por la carretera de Vecinos CL-512, junto a la fábrica de miel ubicada también en la misma zona. La parcela cuenta con una superficie de 159.910,05 m2 (16Ha) y un perímetro de 1.941,34 metros.

La iniciativa corre a cargo de Airworks Helicopters, empresa salmantina de aviación, con más de 20 años de experiencia, dedicada a la realización de todo tipo de trabajos aéreos, dentro y fuera del territorio nacional, entre los que destacan el cuidado del medio ambiente, en especial el ámbito forestal de extinción de incendios y servicios para las administraciones públicas.

El helipuerto ya tiene nombre 'Helipuerto Manuel Tamame', en honor al padre de los dos hermanos Tamame Amigues que dirigen esta empresa familiar. «La idea surgió de una necesidad que tenemos al respecto de las instalaciones actuales de que disponemos en el aeropuerto de Matacán, donde se nos están quedando muy pequeñas, debido al crecimiento continuado que ha ido teniendo la compañía en los últimos 20 años. Estuvimos cinco años hasta que encontramos un terreno apto tanto aeronáuticamente como orográficamente, ya que no vale cualquier terreno para albergar una instalación aeronáutica. Todos estos motivos nos empujaron hacia el emplazamiento actual», explica a Salamancahoy Nicolás Tamame Amigues, uno de los impulsores del proyecto.

El proyecto actual se ha diseñado con un hangar de aproximadamente de 2.000 metros cuadrados, pero que pueden ser ampliables mediante otras instalaciones, pero siempre dentro de la infraestructura que ya está aprobada por AESA en su fase inicial. «Si el crecimiento de la compañía lo requiere podremos continuar en el mismo sitio con una dimensión acorde a la situación empresarial», añade Tamame Amigues.

En cuanto a los servicios que Airworks Helicopters S.L. pretende ofrece en el helipuerto, la instalación del hangar es el componente principal del taller de mantenimiento aeronáutico aprobado para dar el mantenimiento apropiado a los más de 20 helicópteros con los que opera actualmente Airworks Helicopters.

Además, también irán allí la escuela de formación especializada, desde donde se impartirán cursos especializados a pilotos ya titulados, para su desarrollo posterior en la empresa, o en otras de terceros. También se albergará toda la estructura empresarial del grupo junto con sus oficinas administrativas y técnicas, una labor que ahora mismo realiza Airworks Helicopters en una sede en Salamanca capital.

«Nos encantaría, porque la infraestructura lo permite, ubicar algunos servicios adicionales de utilidad pública como emergencias del orden de base contra incendios o medicalizados, pero es muy pronto para eso, aunque no lo descartamos, pero esa decisión de ubicación de estos medios depende de la Junta de Castilla y León», añade a Salamancahoy Nicolás Tamame Amigues.

Airworks Helicopters S.L. arrancó su actividad hace ya más de 20 años. «La empresa es familiar y como tal tiene un carácter muy cercano, tanto con los clientes como con los trabajadores. Yo participé de la creación de la misma de la mano de mi padre, y poco a poco fuimos creciendo en su desarrollo. Actualmente la empresa la dirigimos entre mi hermano y yo, y contamos con un equipo excepcional. Sé que se dice muy a menudo esto, pero es que es cierto, tenemos un equipo increíble», explica Nicolás Tamame.

En cuanto a cuanto a su carrera profesional, significa que «empecé como piloto de avión, formándome en Adventia hace muchos años, y luego hice mi conversión a licencia de helicóptero. Desde entonces he tenido muchísima suerte con mis instructores, y con la gente que nos ha ido rodeando en esta aventura, hasta el sitio en el que estamos ahora. Hemos ido aprendiendo con errores y aciertos, pero en general nos ha ido bien. Cuando nuestro padre falleció hemos seguido con el proyecto y estamos muy contentos con el crecimiento que hemos tenido, aunque aun tenemos muchísimo trabajo por delante, pero este hangar va a ser el cimiento principal para fundamentar el futuro de Airworks».

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