Salamanca podría alcanzar los 40 grados en la peor ola de calor del verano

La tercera ola de calor del verano llega con fuerza y promete ser la más dura de estos dos meses de junio y julio. La primera de ellas tuvo lugar la última semana de junio y se alcanzaron los 36,7 grados como temperatura máxima del año. La segunda superaba por poco a la anterior y apuntaba 36,9 grados el 10 de julio. Un mes más tarde de que el mapa se tiñera de rojo, una nueva masa de aire cálida pinta de granate la provincia que batería récords por altas temperaturas en lo que va de año.

Según las previsiones de la AEMET, a partir de este lunes, las temperaturas máximas no bajaran de los 35 grados. Mientras la semana anterior los termómetros descendían de forma considerable como si de un descanso se tratase, esta semana se elevan a valores que podrían ser incluso históricos. El miércoles 9 de agosto será, en base a los datos que ofrece la Agencia Estatal de Meteorología, el día más caluroso con máximas de 40 grados y mínimas de 23.

Estos altos valores, de cumplirse, darían lugar no sólo a temperaturas especialmente elevadas durante el día sino también se cumplirían las condiciones para hablar de noches tropicales. Sería, por tanto, la primera ocasión en lo que va de verano que los termómetros no bajan de 20 grados en todo el día. No sólo superan ese umbral, sino que lo hacen de forma holgada con tres grados por encima del límite. La noche que más cerca se ha estado de alcanzar esos 20 grados corresponde al 18 de julio -segunda ola de calor-, y se registraron 19,9 grados. Estaríamos por tanto en la mínima histórica más alta registrada en Salamanca de alcanzarse esos 23 grados de temperatura mínima.

Aunque el miércoles es el día más temido, lo cierto es que el resto de la semana será igualmente infernal. Este lunes se esperan máximas de 36 grados y mínimas de 14 grados y el martes se prevén máximas de 38 grados y mínima de 19 grados. A partir del miércoles, las temperaturas comenzarán a disminuir progresivamente y el jueves y el viernes ya se registrarían máximas más bajas: 35 grados y 19 y 17 grados respectivamente de mínima. Estos valores colocan a Salamanca en riesgo amarillo y riesgo muy alto de incendio forestal.

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