La Noche Europea de los Investigadores reúne a 8.000 personas y desborda el barrio del Oeste
Más de 240 investigadores, técnicos y estudiantes acercaron la investigación a la ciudadanía a través de actividades lúdicas
La Universidad de Salamanca volvió a situarse como referente de la divulgación científica con la celebración de la Noche Europea de los Investigadores, que el pasado viernes 26 de septiembre desbordó el barrio del Oeste. Más de 240 investigadores y divulgadores de la institución compartieron su trabajo con cerca de 8.000 personas, en una cita que transformó las calles en un gran laboratorio festivo y al aire libre.
Como novedad, esta edición contó con la participación de grupos de transferencia de conocimiento, que mostraron cómo la investigación de la Universidad se traduce en innovación con impacto social y económico, reforzando la apuesta institucional por la conexión entre ciencia y sociedad.
El compromiso de la Universidad de Salamanca con la cultura científica y la transferencia de conocimiento se refleja en el crecimiento continuo de esta iniciativa, que comenzó de manera modesta y hoy es ya un acontecimiento de referencia para la ciudad y la región. La programación incluyó talleres interactivos, demostraciones, juegos científicos y actividades de ciencia ciudadana que acercaron la investigación a públicos de todas las edades.
Los visitantes pudieron explorar fascinantes fenómenos de la luz y su interacción con la materia, participar en divertidos juegos de matemáticas y hasta observar sedimentos y microfósiles al microscopio. La diversidad de propuestas abarcó disciplinas como biología, lingüística, educación, psicología, geología, medicina, física, química, matemáticas, ingeniería, sociología, farmacia, informática, neurociencia y biotecnología, todas ellas con una acogida extraordinaria.
La Noche se desarrolla bajo la organización de la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación (UCC+i) de la USAL, que cada año convierte este encuentro en el punto de partida de la programación anual de divulgación científica. Gracias a su trabajo constante, la Universidad ha logrado consolidar una auténtica fiesta de la ciencia en el inicio del curso académico, con una identidad propia y un creciente reconocimiento social. Todo ello es posible también gracias al apoyo de la Asociación de Vecinos ZOES y al marco de colaboración del Plan TCUE de la Junta de Castilla y León, que refuerzan una apuesta liderada y sostenida por la Universidad de Salamanca.
La noche del 26 fue un ejemplo claro de esa implicación: una celebración festiva, familiar y de referencia para Salamanca, en la que la Universidad de Salamanca convirtió la ciencia en un verdadero ejercicio de transferencia y encuentro ciudadano.