USAL, Diputación y Eurocaja Rural refuerzan su lucha contra la exclusión financiera en el medio rural
El rector de la USAL, el presidente Javier Iglesias y director general de la entidad financiera, Víctor Manuel Martín, presentan el protocolo de colaboración
La Diputación Provincial de Salamanca, Eurocaja Rural y la Universidad de Salamanca han suscrito un protocolo de colaboración con el objetivo de combatir la exclusión financiera en el medio rural salmantino, un fenómeno agravado por el cierre masivo de oficinas bancarias en los últimos años.
El presidente de la Diputación, Javier Iglesias, ha subrayado durante la presentación de este protocolo la importancia de esta alianza como «una herramienta más para luchar contra la despoblación y garantizar que ningún municipio de la provincia, se quede sin acceso a servicios esenciales como los financieros».
En el acto informativo de la presentación han participado también el rector de la Universidad de Salamanca, Juan Manuel Corchado, y el director general de Eurocaja Rural, Víctor Manuel Martín, quienes han destacado el compromiso de sus respectivas instituciones con el desarrollo del medio rural, la inclusión financiera y la cooperación institucional.
El protocolo establece líneas de actuación conjuntas entre las tres entidades firmantes que permitirán impulsar acciones de formación financiera para jóvenes del medio rural y desarrollar proyectos innovadores apoyados en inteligencia artificial.
Cátedra Internacional de IA Fiable y Reto Demográfico
El protocolo firmado también contempla la organización de encuentros entre Eurocaja Rural y ayuntamientos de la provincia interesados en la implantación de oficinas o servicios, así como la difusión de estas acciones por parte de la Universidad a través de su Cátedra Internacional de Inteligencia Artificial Fiable y Reto Demográfico, que aportará formación, herramientas y apoyo técnico para el desarrollo de proyectos que favorezcan el asentamiento de población en el medio rural.
Para el rector este acuerdo de colaboración facilitará la llegada y el establecimiento de jóvenes profesionales en entornos rurales con alto potencial, quienes contribuirán «al dinamismo económico local impulsando el negocio financiero, y contarán con formación especializada y herramientas de inteligencia artificial».
«Estamos creando, así, las condiciones para que el talento joven encuentre en nuestro campo un espacio fértil donde crecer, innovar y quedarse, y al mismo tiempo reciban las capacitaciones necesarias para que lideren una economía innovadora apoyándose en las fortalezas de nuestra cátedra de IA», subrayó Corchado, quien resaltó el trabajo realizado desde la Cátedra Internacional de Inteligencia Artificial Fiable y Reto Demográfico, desde la que se ha desplegado un programa de investigación con 20 estudios agrupados en 9 líneas temáticas relativas a la economía y sociología; la agroindustria, los estudios de género, la teleasistencia rural, el 'Edge computing', el turismo rural, los algoritmos cuánticos, la optimización cuántica y el cambio climático.
Asimismo, el rector anunció el próximo lanzamiento de un Clúster Internacional IA4Rural, «que busca conectar empresas, talento y conocimiento para acelerar la innovación y transformar el sector rural mediante la inteligencia artificial», y de la creación de un 'Living-Lab' dedicado al desarrollo de soluciones de IA aplicadas al reto demográfico, a las oportunidades locales de innovación compartida que propongan las asociaciones locales o comarcales.
Colaboración institucional
En este sentido, Javier Iglesias ha puesto en valor la «estrecha y sólida colaboración que mantiene la Diputación con la Universidad de Salamanca», a la que ha calificado como «un socio estratégico para promover la investigación, la innovación y la retención del talento al servicio del mundo rural». Según ha manifestado, «la unión interinstitucional es fundamental para avanzar como sociedad, sumando conocimiento y compromiso con nuestros pueblos».
Asimismo, el presidente provincial ha recordado que la Diputación de Salamanca fue pionera en la búsqueda de soluciones ante la exclusión financiera con la puesta en marcha del proyecto del Bibliocajero, inspirado en el modelo de los bibliobuses. Esta iniciativa ha permitido instalar dos cajeros móviles que dan servicio a un total de 130 pequeños municipios, especialmente en zonas donde no existe ninguna otra alternativa bancaria.
Los cajeros, además de su movilidad, son dispositivos 100% seguros y accesibles, equipados con cámaras de vigilancia y adaptados para personas con discapacidad.
