El fuego no da tregua en Ávila y remite en Galicia

No ocurrió así en Ávila, dónde las llamas mantuvieron su avance en el sur de la provincia, en el Valle del Tietar, arrasando grandes superficies arboladas en torno las localidades de Pedro Bernardo y Santa Cruz del Valle. Los cambios de viento reavivaron las llamas que impiden «anclar» los flancos del fuego en Lanzahíta, San Esteban del Valle y la referida Pedro Bernardo. Obligaron además a cortar la carretera provincial AV-922 desde Pedro Bernardo hasta el puerto del municipio abulense.

El director técnico de extinción del operativo de la Junta de Castilla y León, Ángel Iglesias, explicó que las condiciones para trabajar en la zona y contener las llamas era «muy desfavorables» por la orografía, el combustible y temperaturas que provoca que haya «saltos constantes». Este mismo experto señaló a última hora del día que el incendio de Santa Cruz del Valle había ganado en «potencialidad y peligrosidad» por sus «constantes reproducciones». De hecho, según datos oficiales afecta ya a unas 1.000 hectáreas.

En Galicia se logró controlar las llamas cerca de municipios como Caldas de Reis, Vilagarcía de Arousa, Arbo, Mourentán o Ponte Caldelas. Solo el incendio de Boiro, que afectó también a los municipios de Ribeira y A Pobra do Caramiñal, arrasó una superficie de 2.200 hectáreas. En las últimas tres semanas las llamas han devorado cerca de 40.000 hectáreas toda la comunidad.

Alberto Núñez Feijóo, líder del PP y expresidente de dicha comunidad autónoma, condenó los incendios provocados por «personas desalmadas» y demandó al Gobierno un Ministerio de Medio Ambiente y no de «intransigencia energética».

Feijóo aseguró que los incendiarios provocan los fuegos «con distintos focos, principalmente de noche, cuando los medios aéreos no pueden volar». «Lo hacen con interés de producir una catástrofe medioambiental y a veces incluso ponen en riesgo vidas, aldeas y patrimonios», denunció desde la localidad pontevedresa de Cambados.