'Pesadilla', la última variante Covid: de dónde viene y los nuevos síntomas que trae

Se trata de un nuevo sublinaje de Ómicron que apareció en Singapur hace un mes y que se expandió con gran velocidad. Este es uno de los indicadores que preocupa a los expertos cada vez que aparece un nuevo tipo de Covid: su capacidad para expandirse. Pero, ¿hay motivos para preocuparse?

La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha confirmado ya que las señales apuntan a una nueva y próxima ola de contagios, motivada por las nuevas mutaciones del Covid. Estos linajes crecen cada vez más y a finales de este mes de noviembre podrían llegar a superar el 50% de las infecciones en Europa. Todas son de Ómicron, la variante dominante de la pandemia en estos momentos.

Por ahora, no han provocado olas significativas gracias a la alta cobertura de vacunación, pero llega el frío y la situación podría complicarse. Por ahora no se ha registrado un aumento significativo del número de contagios, pero tienen capacidad para escapar a la protección de las vacunas.

Esto es lo que ocurre con el nuevo sublinaje de Ómicron, el último, que ha sido bautizado por 'The New York Times' como variante 'pesadilla'. Sucede en el orden de apelativos a la variante 'perro del infierno', nombre que hace alusión a Cancerbero, el perro del dios Hades que custodiaba las puertas del infierno.

Lo mismo ocurre con 'pesadilla'. En realidad, su nombre en inglés es 'gryphon', lo que en español se traduce como 'grifo', el ser mitológico con cuerpo de león y alas y cabeza de águila. Se ha hecho mucho más popular con el sobrenombre de variante 'pesadilla', pues los expertos creen que muestra una mayor resistencia a los anticuerpos respecto a otras variantes.

Este tipo de nombres han empezado a ponerse por la aparición de variantes y subvariantes de Ómicron. La OMS empezó bautizando las nuevas cepas con letras del alfabeto griego y, más adelante, se podrían usar los nombres de constelaciones poco conocidas.

Los síntomas son similares a los del resto de variantes y subvariantes de Covid, es decir, tos, dolor de garganta, fatiga, malestar general, diarrea, congestión y secreción nasal, dolor de cabeza, fiebre, dolores musculares, ahogo o pérdida de olfato y gusto. Suman tres particulares que no habían aparecido: pérdida de apetito, afonía y taquicardia.