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Perfumerías Avenida se llevó otro clásico de la Liga Femenina del baloncesto español ante Girona. Dos conjuntos que, pese a los cambios habituales de cada temporada, se conocen sobradamente y son uña y carne a la hora de verse las caras en las finales por el título. Ahora, todavía con solo tres jornadas de liga, Perfumerías Avenida se llevó el primer choque de esta temporada y le vale para mantenerse invicto en la liga nacional. Enfrente, un Girona todavía por hacerse del todo ya que Mitchell y Berstch, sus dos jugadoras WNBA, han llegado sin realizar la pretemporada con las de Laura Antoja. Pero Avenida, después de un mal inicio, supo reponerse y sacar con maestría, fundamentalmente en el segundo cuarto, el duelo. El mejor nivel de Alexis Prince desde que llegó a Salamanca, junto a unas estelares Gil y Cakir condujeron al éxito al conjunto charro antes de visitar a Bolonia en la Euroliga.
En su segundo partido en casa esta semana el equipo entrenado por Pepe Vázquez partió con el siguiente quinteto inicial frente al Girona, en el choque de máxima rivalidad en los últimos años: Silvia Domínguez, Antonia Delaere, Alexis Prince, Bria Hartley y Mariella Fasoula. En este caso y respecto al partido del pasado miércoles en Euroliga las salmantinas partieron con la capitana en el quinteto inicial, en lugar de con Olçay Cakir.
PERFUMERÍAS AVENIDA
Silvia Domínguez (3), Antonia Delaere (2), Alexis Prince (20), Bria Hartley (5) y Mariella Fasoula (14) -quinteto inicial-Olçay Cakir (11), Andrea Vilaró (2), Leonor Rodríguez (6), Laura Gil (4), Sika Koné (2) y Lucía Rodríguez (-).
68
-
52
SPAR GIRONA
Kelsey Michelle (16), Laura Peña (8), Mariana Tolo (6), Marta Canella (3) y Morgan Bertsch (5) -quinteto inicial- Magarity (10), Parra (-), Sandra Ygueravide (no jugó), Ainhoa López (3), Giedre Labuckiene (1) y Doumbia (-).
ÁRBITROS Jacobo Rial, Rodrigo Palanca y Javier Villanueva.
PARCIALES 15-25; 23-4 (38-29); 19-19 (57-48); 11-4 (68-52);
INCIDENCIAS Partido correspondiente a la tercera jornada del campeonato nacional de Liga Femenina Endesa 23/24 celebrado en el pabellón de Würzburg de Salamanca, ante . En el palco de autoridades estuvo presente el seleccionador nacional de baloncesto femenino, Miguel Méndez. Lleno, 3.000 personas.
Las perfumeras empezaron como un relámpago, con dos canastas consecutivas de Bria Hartley y de Alexis Prince para poner un 4-0 en el marcador ante Girona, que respondió con una bandeja de la estrella WNBA Mitchell. La respuesta total del equipo catalán consistió en un parcial de 0-7 que le dio la vuelta al electrónico, aunque Alexis Prince puso un triple para igualar de nuevo la contienda. El cabreo de Pepe Vázquez para empezar el encuentro fue notorio con las suyas por dar ciertas facilidades a las catalanas en defensa.
El partido empezó precioso y con un ritmo vibrante, propio de un duelo entre dos plantillas de Euroliga. El dominio del físico en el interior y la velocidad a la hora de mover el esférico eran dos de las claves del partido, señaladas en la previa por Pepe Vázquez y Laura Antoja. Tras cinco minutos de choque, Girona mandaba con un sonrojante 9-16 en contra de las azulonas, desaparecidas en defensa. Magarity y Tolo dominaban el poste bajo ante la insuficiente oposición de Salamanca, lo que obligó a Pepe Vázquez a detener el partido. El rebote defensivo costaba que apareciera. El ofensivo era nulo. Pepe decidió apostar por Laura Gil, Vilaró, Cakir y Leo en sustitución de todo el equipo salvo Fasoula: el gallego intentó igualar el poderío físico bajo aro con la entrada de la murciana en la cancha. Koné completó la rotación para darle aire a la griega a tres minutos del final del primer parcial.
Las gerundenses eran superiores en el inicio. Los rápidos movimientos en el exterior de la bola y la permisividad defensiva en algunas jugadas le costaron caro a las jugadoras azulonas de Pepe Vázquez. Tras los primeros diez minutos, el marcador era un 15-25 a favor de Girona, un claro ejemplo de lo visto en la pista.
Una canasta de Andrea Vilaró y otra de Sika Koné desde la línea de tiro libre redujeron las distancias frente a Girona (19-25). El equipo charro, además, cambió la cara totalmente en defensa. El aumento de intensidad y de atención provocaron que pudieran frenar aún más a las de Laura Antoja, que se pasaron cuatro minutos sin poder anotar en el segundo parcial. Una falta como una catedral de una superada Parra le dio a Silvia la opción de anotar otros dos tiros libres, y dos puntos, para poner a las de Vázquez a tres puntos. Con el público entregado de nuevo, la remontada azulona se convirtió poco a poco en épica gracias a otras canasta de Prince. Y cuando más enchufadas estaban las salmantinas, llegó una defensa magnífica de Hartley en el ataque visitante que forzó el error y la pérdida de balón de las catalanas. Una nueva falta de Ainhoa López posibilitó que Prince se fuera a la línea del tiro libre y sumara dos puntos que consumaron el 11-0 de parcial para Avenida y el 26-25 en el marcador.
El segundo era el cuarto de Alexis Prince. La americana se puso el guante y anotó todo lo que le caía. Un triple suyo le dio cuatro puntos de ventaja a las azulonas. Girona estaba noqueado, con solo dos puntos sumados en siete minutos y con cinco faltas personales cometidas desde hacía varios minutos. Y es que el despliegue salmantino, también físico, fue de renombre durante ese segundo cuarto. No obstante, y con los primeros seis puntos de ventaja para Avenida, Pepe Vázquez detuvo el choque a dos minutos del descanso. Una jugada ''made in Fasoula'' puso los nueve puntos de colchón de las charras ante Girona, y también frente a la desesperación de las jugadoras de rojo, que asistían a un vendaval local.
Un 38-29 en el marcador favorable al conjunto de Vázquez lo decía todo a dos segundos del descanso. Para no perder ni una sola oportunidad, Pepe pidió tiempo muerto para preparar la última jugada, aunque no cambió el marcador. Nueve puntos de ventaja tras la primera parte favorables al conjunto azulón, que dejó en cuatro al Girona tras los 20 minutos iniciales. Repaso total tras el mal inicio.
El inicio del tercer cuarto continuó por los mismos derroteros que acabó el segundo. Con una Alexis Prince enchufadísima de nuevo (robo tras canasta), y con un equipo dominador que impedía constantemente penetrar dentro a Girona. Las gerundenses desaparecieron de la pintura ya en el segundo cuarto, y eso tuvo su continuación en el reinicio del partido. Cierto es que los dos equipos cometieron varios fallos en ataque que le dieron la ventaja en la siguiente jugada a las contrarias; eso hizo que Avenida tuviera más difícil aventajarse en el marcador cuando sumaba 12 puntos de diferencia.
Y el fallo, en equipos de tan alto nivel, se paga. Dos triples de Girona volvieron a meter de lleno en el partido a las de Antoja, el segundo conseguido gracias a una acción de Peña. El duelo en ese tercer cuarto, lejos de ser vistoso más allá del inicio, estuvo plagado de interrupciones por las faltas y marcado también por los excesivos errores de los dos conjuntos. Ainhoa López matizó el marcador a un minuto del final con otro triple que dejó a las suyas a seis puntos. Avenida se durmió en el ataque, pero Cakir lo arregló con un triple preciso que fijó la distancia favorable a las de Salamanca en nueve puntos (57-48), con todo abierto aún pero con una merecida ventaja para las de Vázquez.
Con control y seguridad Avenida sabía que la victoria no se le escapaba. La diferencia favorable era suficiente como para matar el partido manteniendo el alto nivel defensivo que el equipo consiguió tras su lastimoso inicio. En ese sentido, Laura Gil aportó -como siempre- quilates al equipo azulón. El buen papel de Cakir en muchos momentos del partido, y la estrella de Prince guiaron al equipo hacia un camino cada vez más cercano al triunfo.
Las buenas sensaciones las rubricó con un triple Leonor Rodríguez, segundos antes de que Cakir se llevara el reconocimiento del público. El choque estaba en bandeja para las azulonas, pero Pepe Vázquez detuvo de nuevo el encuentro. La ventaja ya era clara, de 17 puntos, porque Girona se nubló totalmente también en ese cierre del duelo. Sumó un punto en siete minutos.
Pese a la enorme distancia, Mitchell seguía combativa tratando de impedir que las charras sumaran más puntos. El resto del equipo de Girona parecía físicamente fundido hacía varios minutos. Eso es lo que tuvo, precisamente, Lucía Rodríguez. Un par de jugadas para intentar disfrutar del baloncesto. El clásico se quedó en casa, y Avenida cierra una semana muy buena de sensaciones y de resultados con vuelta de honor incluida, a petición de los aficionados, en el parqué de Würzburg.
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