Una salvación milagrosa para evitar el primer fracaso deportivo de Unionistas

No ha pisado durante toda la temporada 2024-25 las posiciones de descenso... pero ha estado a un suspiro de sufrir la primera perdida de categoría de su corta y exitosa existencia. Unionistas de Salamanca seguirá una temporada más en la Primera RFEF, tercera categoría nacional, después de sufrir hasta la jornada final el peligro de perder un nivel que lleva disfrutando siete temporadas consecutivas. La 2025-26 será la octava. Hasta ha perdido en la jornada final ante el Barcelona Atlètic (2-1) este sábado pero los resultados favorables de otros rivales directos han evitado el primer descenso blanquinegro. De milagro... tras una temporada en la que el club presidido por Roberto Pescador ha hecho muchos méritos para irse a la cuarta categoría nacional.

Unionistas, creado en 2013, no salió a competir hasta la campaña 2014-15; y de ahí en adelante todo fueron alegrías. Ascenso de Provincial -la categoría más baja del fútbol charro- a Regional son solo una derrota; en la 2015-16 se subió a Tercera sin derrotas; en la 2016-17 quedó tercero en el grupo VIII de la Tercera División y disputó el play-off de ascenso, finalizando eliminado ante el Olimpic de Xativa; y una campaña después, la 2017-2018, llegó el ascenso a Segunda B -la antigua tercera categoría nacional-, cayendo primero ante el Don Benito en la eliminatoria de campeones, y después venciendo a la SD Tarazona y al UD Socuellamos, con el inolvidable penalti de Razvan en los minutos finales de la eliminatoria de vuelta jugada en Las Pistas -su anterior y segundo campo de juego-.

Y a partir de ahí han sido siete campañas en la tercera categoría nacional: tres denominada como Segunda B y cuatro en la Primera RFEF, rozando incluso fases de ascenso en varios cursos estando vivos por ello hasta las jornadas finales. Por el camino también ha habido eliminatorias históricas de Copa del Rey como las del Deportivo o las más recientes del Real Madrid, Villarreal o FC Barcelona..., estas dos últimas ya en el Reina Sofía.

Sin embargo, todo ha cambiado esta temporada. Una campaña que ha salido cruzada casi desde el inicio, con el equipo de Dani Llácer -el segundo de Dani Ponz la campaña anterior- incapaz de ganar fuera de casa -despedido el pasado 6 de abril-, un lastre que ha pesado tanto hasta que el equipo, ya con el argentino Acciari a los mandos, logró vencer casi 'colgado' del larguero al filial del Athletic Club. Y este sábado, de nuevo colgado del larguero gran parte del encuentro, ha perdido y se ha salvado por el demérito de otros en una jornada final de infarto.

La nefasta racha arrastrada desde antes (solo una victoria en los últimos 11 partidos) con el empeño de la directiva de mantener al joven e inexperto Llácer a los mandos, ha terminado haciendo sufrir al equipo a jugar por evitar el descenso hasta el último suspiro.

Afortunadamente la próxima campaña seguirá en la tercera categoría nacional pero los errores de planificación (director deportivo), gestión de la primera plantilla (entrenadores) y permisividad (presidente) de este curso no deben pasar en vano para los próximos días y la preparación de la 2025-26.

• Temas
• Unionistas de Salamanca