Unionistas tira dos goles de renta en el tramo final y no pasa del empate en el campo del colista

Sigue sin vencer a domicilio Unionistas, que desperdició una oportunidad inmejorable en el feudo del colista, al que tenía en la lona con un 0-2 a falta del cuarto de hora final. La irrupción del revulsivo Carbonell, con dos tantos en plena ofensiva final, dejó sin el botín mayor al equipo charro, que pasó de dejar una sensación de superioridad y suficiencia, tras superar el sobresalto de una inexistente pena máxima en el primer periodo que atajó Iván Martínez, a agradecer el final para evitar males mayores (2-2).

De elevado corte táctico, amparado en las precauciones de ambos bandos partió el duelo, con un Ourense CF protegido sobre una zaga de cinco hombres y con el estreno del veterano Pato bajo los palos. Unionistas, con cuatro novedades en el once con respecto a la derrota con la Leonesa, asumió el control de la posesión en los primeros diez minutos, en los que apenas Vergés logró generar peligro con un lanzamiento raso cruzado que detuvo el meta uruguayo. Salieron mal parados de los primeros lances los arietes de ambas escuadras, con sendas amonestaciones para Gorka Santamaría –cuando apenas se habían consumido 20 segundos– y Di Renzo por golpear al rival con el codo en un salto.

Rebasada la barrera de los diez minutos, merced a dos buenas transiciones y con Hugo Sanz como protagonista al incorporarse al ataque, el cuadro pontino logró hacerse durante unos instantes con el timón de la contienda, aunque el equipo de Dani Llácer, con muchos problemas en la circulación, frenó la escalada anfitriona. Ni el intempestivo horario ni el temporal que azota Galicia fueron freno para que un centenar de animosos espectadores charros acudieran al remozado feudo auriense, un campo que el colectivo charro ya visitó en el verano de 2017, en un memorial por el extinto CD Ourense, contra el representante ourensano del fútbol popular, la UD Ourense (1-0).

Rebasado el ecuador del periodo, fruto de una mala acción defensiva del activo Vergés en un balón largo de Miguel, Andrada estuvo cerca de plantarse ante Iván Martínez, protagonista tres minutos después al detener una inexistente pena máxima de Iñaki sobre Hugo Sanz que ejecutó Alberto Gil. La acertada estirada del meta soriano taponó la vía de anotación para un colista presionado, más si cabe, tras marrar el segundo penalti de la temporada. Del corsé de precauciones y errores solo salió, antes del intermedio, un centro lateral de Andrada que cabeceó alto Alberto Gil con el marco vacío tras la salida en falso de Iván Martínez.

Dio un paso al frente Unionistas en el reinicio, tratando de comprometer a un rival que sabía que tenía que dar un paso al frente. En dos acciones casi consecutivas se le vieron las costuras defensivas al conjunto local, desmoronado tras un centro raso de Rabadán para Santamaría; el atacante bilbaíno cruzó su remate y se encontró con la estirada de Pato, que dejó un rechace manso embocado a puerta vacía por De la Nava (0-1). Del aturdimiento posterior salió el Ourense CF con cuatro tentativas en acciones a balón parado. Los cambios, superada la hora de juego, dieron un pequeño impulso a la escuadra que adiestra Rubén Domínguez, con otra llegada peligrosa que llevó la firma del revulsivo Álex Gil. La tímida ofensiva trajo consigo un creciente descuido en la retaguardia que castigó el recambio Dani Martínez a centro de De la Nava (0-2).

Los nervios mudaron en desesperación para un colista que sigue sin adaptarse a la categoría tras deslumbrar la pasada campaña en Segunda RFEF, y que, en su arreón final, tirando de orgullo llegó, para sorpresa de todos, a igualar el partido. El 1-2 llegó en una acción atropellada, con pifia defensiva incluida, culminada por una media chilena de Carbonell. La diana fue gasolina para los locales, que encerraron a Unionistas hasta alcanzar la igualada replicando la misma asociación entre Álex Gil, asistente, y Carbonell, rematador y héroe local.

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