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Los españoles sufrieron el año pasado los peores momentos para afrontar el pago de la factura de la electricidad y el gas como consecuencia de unos precios disparados a récord históricos sobre todo por la guera en Ucrania. Cada familia se buscó la alternativa más viable para reducir el importe de esos recibos. Y entre las opciones más ágiles, una buena parte de los ciudadanos optó por cambiarse de compañía energética.
El mercado de la luz y el gas vivió un auténtico cambio de suministradores durante 2022, año en el que un 14,2% de los hogares optó por una comercializadora distinta a la que hasta entonces tenía contratada; y un 11,2% de los usuarios de gas natural hicieron lo mismo, según los últimos datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
En concreto, casi 6,5 millones de clientes cambiaron de compañía de electricidad, lo que supone un 27% más que el año anterior. Entre 2020 y 2022 se multiplicaron por tres los cambios del mercado regulado (tarifa PVPC) al libre. Aunque la mayor parte de ese baile de clientes se registró entre las propias comercializadoras de mercado libre.
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En el caso del gas, se contabilizaron 1,5 millones de cambios, lo que supone un 46% más que en 2021. Este incremento exponencial se explica por el alza de la tarifa de gas, que llegó a multiplicarse por cuatro, lo que impulsó a muchos hogares a acogerse a la tarifa regulada (TUR) a las puertas del invierno, tras la congelación de precios aprobada por el Gobierno y la normativa que habilitaba estos traslados sin tantos impedimentos, incluidas las comunidades de vecinos.
Con estos datos, el mercado energético recupera el nivel de cambios de compañía que había perdido cuando comenzó la pandemia, en 2020. Por entonces, los precios de la luz y el gas cayeron con fuerza por el cerrojazo a la actividad diaria, y no preocupaba tanto el importe de la factura. Sin embargo, el traslado a otras compañías se ha vuelto una práctica habitual entre los más de 27 millones de consumidores que hay en toda España. En el caso de los clientes de compañía eléctrica, el cambio ha crecido casi 5 puntos porcentuales en dos años, lo que supone un aumento relativo del 51%. Si nos fijamos en los cambios de compañía de gas, el crecimiento relativo respecto de 2020 ha sido del 61%.
En esta primera parte de 2023, los precios del gas y de la luz se mantienen mucho más estables que durante el año pasado. En el caso eléctrico, mayo se encuentra en una media de 72 euros/MWh, y el gas natural cotiza por debajo de los 30 euros/MWh frente a los 300 euros/MWh del verano pasado.
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