Díaz se reunirá con Sánchez para tratar de desbloquear la ley de vivienda

El miércoles pasado, el departamento que dirige Nadia Calviño lanzó una oferta que no convenció a los morados ni a EHBildu y Esquerra, que también participan en las conversaciones: elevar hasta el 3% el tope de las rentas para las zonas tensionadas, de forma temporal. Desde entonces no ha habido nuevos avances.

Díaz, que se encontraba en Bruselas para participar en el Consejo de Ministros de Empleo de la Unión Europea, retó al PSOE a «ser más ambicioso» con la nueva ley para que esta «pueda garantizar precios asequibles a las personas que vivan de alquiler». También reconoció la cuestión «como el gran problema de los españoles junto al desempleo».

En Podemos reconocen que pese al optimismo mostrado por el Gobierno a principios de año –«vivienda se aprobará antes de marzo», llegaron a pronosticar ambas partes– la negociación sigue abierta y «todavía está lejos un acuerdo». Los morados consideran que tan importante como que la norma salga adelante es que esta «sea eficaz y logre reducir los precios del alquiler». Algo que, creen, no se está garantizando en este punto de las conversaciones.

Pero la cuestión, sobre la que reinaba cierta armonía hasta hace pocos días, amenaza con enconarse y convertirse en otra fuente de ruido para la coalición. Este domingo, la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, pidió a su socio aprobar la ley de vivienda «aunque sea por electoralismo» e insinuó que los socialistas están vendidos a los fondos buitres. Este lunes el coportavoz de Podemos Javier Sánchez Serna volvió a echar leña al fuego: «Si el PSOE deja de coger el teléfono dos semanas a la patronal de vivienda, esta ley se acelerará».