Secciones
Servicios
Destacamos
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
Se recomienda ver 'The Batman', la película con Robert Pattinson haciendo de Hombre Murciélago, disponible en casi todas las plataformas conocidas, antes de degustar 'El Pingüino', de reciente lanzamiento. El popular villano de Gotham, icónico gracias a Tim Burton con el rostro de Danny de Vito, hace acto de presencia en el recomendable filme sin apenas protagonismo, ofrece casi un cameo, pero sus tribulaciones serializadas suponen una continuación de la historia planteada en formato largo. La fuerza del personaje, y el hecho de que lo encarne bajo un maquillaje alucinante el mismísimo Colin Farrell, ha derivado en una serie, estrenada semanalmente en Max, que parte del final de la última adaptación del famoso justiciero de la noche, dirigida por Matt Reeves en 2022, a modo de spin-off.
Lo primero que llama la atención de esta nueva versión de uno de los secundarios más notorios del universo de DC Comics es que no parece que estemos ante otra producción basada en la imaginería superhéroica. Nos encontramos, más bien, ante otra lucha por el poder entre mafiosos. De hecho, al terminar el capítulo en la plataforma, la lista de recomendaciones afines opta por aconsejar por similitud 'Boardwalk Empire', 'Los Soprano' o 'El padrino de Harlem'. Por tanto, el tono está más cerca de 'El padrino' que de la serie 'Gotham' o 'La Liga de la Justicia'.
'The Batman' se miraba más en 'Seven' que en las películas de paladines de la justicia enmascarados. Importaba la atmósfera, de thriller oscuro, por encima de las acrobacias del caballero de la noche. El héroe con capa es lo de menos, lo que ocurre a su alrededor es lo realmente interesante, como parece vender 'The Penguin' aka 'El Pingüino', cuyo capítulo de apertura se antoja un buen ejemplo de cine criminal, con la mafia como tema central. Abriéndose camino, entre lo peor de lo peor, a base de astucia y mezquindad, encontramos a Oswald Cobb, un gánster contrahecho, con una peculiar manera de andar, bamboleante, debido a un problema en un pie amorfo. Su afilada nariz y las marcas en la cara, además de sus vaivenes al pisar el suelo, le han valido un mote que nunca se pronuncia en la serie, ya que Oz, abreviatura de su nombre real, odia el característico apodo por el cual se le conoce en los bajos fondos. Colin Farrell, irreconocible, lo da todo bajo el látex, con varias prótesis espectaculares. Por momentos, recuerda físicamente a Robert de Niro, con unos kilos de más, aunque su carácter se asemeja más al de Joe Pesci en 'Uno de los nuestros' (imposible olvidar alguna de sus míticas escenas violentas, pero el tipo en cuestión resultaba entrañable, a pesar de su malicia y agresividad, una de las claves del éxito del género).
Aplicándose a medias el look sombrío de 'The Batman', 'The Penguin' es una historia de origen, la del mayor criminal de la ciudad de Gotham, bajo una perspectiva realista, aunque la ambientación, por momentos, despista, con algunos extraños anacronísmos. Estéticamente remite al cine de mafiosos de Martin Scorsese, a los años 70, pero hay teléfonos móviles y, dependiendo de dónde nos encontremos, tenemos claro que lo que acontece no ocurrió durante el pasado siglo. Parecen imágenes antiguas, pero no lo son. La buena factura técnica acompaña a un guion firme, sin titubeos, pero poco sorprendente. Varios roles interactúan en escena, cada cual con sus motivaciones. No hay escenas de acción y Batman no está ni se le espera, un detalle que puede desesperar a los fans más recalcitrantes.
¿Estamos ante otra propuesta que blanquea a un villano? El pérfido enemigo de Bruce Wayne, con o sin capucha, tiene su corazoncito, pero sus miserias siguen visibles. Oz no lleva monóculo ni sombrero de copa. Tampoco luce unas ojeras prominentes, manos de palmípedo y una tez extremadamente pálida. Es un capo de la mafia, con andares de pato, dispuesto a todo con tal de sobrevivir y convertirse en el máximo representante de los negocios sucios de Gotham, con el narcotráfico en primera plana. No estamos ante una adaptación literal de los cómics, pero la propuesta no desentona, apostando por una creatividad audiovisual de actualidad.
No hay apenas caricatura en el personaje principal, al margen de su forma estrambótica de caminar, si bien en cualquier momento puede agitar su característico paraguas. Las calles están a punto de arder tras la gran inundación del clímax de 'The Batman'. La llegada de un nuevo tipo de droga rompe el equilibrio entre los miembros del Hampa dueños del lugar. La suerte está echada y Oz, que despierta entre sus semejantes más fobias que filias, tiene todos los boletos para convertirse en el amo y señor de la ciudad por la puerta de atrás. Conocemos sus conflictos, su lado más íntimo, sus repugnantes valores y su codicia. 'The Penguin' se toma su tiempo para retratar el ascenso implacable del sumo villano. Enfrente tiene a Sofía Falcone, interpretada por Cristina Milioti ('Fargo'), una psicópata recién salida de Arkham Asylum que hereda el imperio del mal construido por su padre muerto. Próxima parada: 'The Batman II'. La serie es el puente.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Muere Jesús Melgar, periodista y productor de Jesús Quintero
ABC de Sevilla
«La verdadera fuerza de las farmacias está en los pueblos pequeños»
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.