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La eliminatoria de Copa del Rey entre Unionistas y FC Barcelona ha dejado un gran sabor de boca, dado que prácticamente todo ha salido bien. La respuesta del público, la organización, el propio partido... el club ha subido un escalón en este choque de galaxias en su proyección y en su capacidad, aunque también hay cosas que no han sido como debiera, como el asunto de la camiseta homenaje o los altercados. Y la ocasión también deja la propuesta de ampliar la capacidad del estadio municipal, algo que se puede topar con problemas.
Durante toda la semana, Unionistas y el Ayuntamiento de Salamanca, titular de la instalación, buscaron la manera de ampliar la capacidad para acoger público. En su configuración actual, está por debajo de los 5.000 espectadores, a falta de que, en un futuro, se pudieran completar las esquinas de las gradas, que es lo único que falta por cerrar. Esta búsqueda ha animado al propio alcalde, Carlos García Carbayo, a comprometer un aumento de aforo.
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El martes 16 de enero se registró la documentación técnica correspondiente a la instalación de las gradas auxiliares. Según ha confirmado la Policía Local en comisión informativa municipal, la capacidad de las mismas era de 1.493 localidades más, pero no todas se llegaron a vender por su escasa o nula visibilidad, algo que apuntó el propio club, que no quería comercializar asientos sin garantizar un buen espectáculo.
En total, la capacidad total para el partido ante el Barça rondaba los 6.200 asientos y la afluencia oficial fue de 6.246 personas, lleno absoluto, récord de la instalación y una de las mejores afluencias a un espectáculo deportivo en Salamanca desde que la UD Salamanca desapareció. De hecho, supera a la fase final de la Copa de la Reina de 2020 con con 4.368 personas en el Multiusos Sánchez Paraíso.
Sin embargo, el Reina Sofía tiene complicado aumentar mucho su capacidad máxima. El problema es la evacuación de los asistentes, algo que hay que contemplar a la hora de hacer un proyecto de ampliación en este complejo y que supone un límite, salvo que se modifique ese condicionante.
Según ha explicado el jefe del Servicio de Bomberos se informa que la ocupación final del estadio está cifrada en estos momentos en esas 6.200 personas con las gradas supletorias instaladas para la ocasión, pero que la capacidad total de evacuación del recinto es superior: concretamente, de 7.800 personas.
7.800 espectadores
Es la capacidad total de evacuación del recinto
Eso supone que los accesos y salidas previstos, una habitual y otro adicional, fueron suficientes para este partido, pero tienen una capacidad máxima que limitaría la ampliación de aforo hasta esos 7.800 espectadores. Ese sería el máximo de capacidad de que se podría dotar en caso de decidir una ampliación de las gradas del estadio con una nueva obra.
En todo caso, todo a punta a que la instalación, el único estadio de fútbol público con el que cuenta la capital, va a seguir recibiendo inversiones como se ha hecho con la ampliación de potencia para evitar apagones, las obras de los accesos, el contrato de cuidado del césped o el campo anexo.
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