La artista de Salamanca que abre nuevas miradas al arte abstracto
Ruth Rodríguez incorpora una gran variedad de obras a su primera exposición pública en el Centro Comercial El Tormes
Arte que nace del riesgo, de la consistencia y de experimentar una y otra vez hasta descubrir aquello que realmente se quiere contar. Esto es lo que define el trabajo de Ruth Rodríguez, artista salmantina del arte abstracto contemporáneo que combina técnicas novedosas y juega con la fuerza del color y los efectos visuales para dar vida a sus obras.
Ahora, presenta en el Centro Comercial El Tormes su primera exposición individual 'Entelequias' en la que incluye varias de sus obras, algunas finalistas en concursos. Esta muestra supone su primera presentación pública, un punto de inflexión para una artista que lleva años constuyendo su propio camino desde la autodisciplina.
Una pasión de toda la vida
La pasión por pintar la acompaña desde siempre, pero fue hace cinco o seis años cuando pudo retomar la práctica artística de manera constante, al habilitar una habitación de su casa como estudio personal con estanterías, materiales y un suelo de goma que le facilita el trabajo: «Necesitaba un lugar donde estar tranquila y este espacio me ha permitido volver a crear».
Su proceso creativo parte de la observación cotidiana: desde los colores que aparecen en una ventana hasta cualquier detalle que se transforma en idea. «Me inspiro en muchas cosas que veo o siento. La idea va creciendo hasta que consigo plasmarla», resume. Pero esta curiosidad ya era visible desde su adolescencia: «Tenía 16 años y cogía una rama, la pintaba y la plasmaba en un lienzo».
Técnica construida por ensayo y error
Ruth ha desarrollado su estilo mediante la experimentación constante, borrando y empezando de cero tantas veces como fuera necesario hasta lograr el resultado deseado. Cuando se coloca frente al lienzo, nunca lo hace sin una idea previa: «Voy con una idea clara de la técnica que quiero utilizar y lo que tiene que aparecer en la obra, aunque el abanico de posibilidades es infinito».
«El abanico de posibilidades es infinito»
Le gusta trabajar en series, desarrollar variaciones de una misma idea y dejar que las piezas generen otras nuevas. Eso sí, reconoce que el proceso creativo depende también del momento: «A veces una idea te ronda mucho tiempo, pero no es el momento de plasmarla. No todos los días estoy inspirada y no se puede forzar».
Resina, acrílicos y efectos visuales
En algunas de sus obras utiliza la pintura acrílica para intensificar el color pero, sin duda, su material más característico es la resina epoxi: «la resina te abre un mundo. Es tediosa y tengo que usar máscara, pero cuando le coges el truco merece la pena», explica. El acabado brillante le recuerda al agua y aporta profundidad, una sensación que se percibe claramente en varias de las piezas expuestas.
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La muestra incluye además obras con efectos tornasolados, piezas cuyo color cambia dependiendo del ángulo de visión y cuadros que se transforman bajo la luz LED ultravioleta, reactivando los tonos y aumentando su intensidad. En algunos casos, la firma no aparece para permitir que el comprador pueda colgar la obra a su gusto: «No quiero condicionarlos; cada pieza puede funcionar en múltiples posiciones». Incluso los marcos, pintados por ella misma, forman parte de esa búsqueda total de coherencia estética.
«Soy muy inquieta y todo me apetece»
La artista valora que el espectador complete el sentido de sus obras. La artista se apoya en la pareidolia, la tendencia del cerebro a reconocer formas familiares, para que cada visitante interprete algo distinto: «Cada cuadro plasma lo que yo querría representar, pero no tiene un significado concreto».
La colección también muestra piezas más pequeñas y objetos personales -camisetas, llaveros, botellas o bandejas- elaborados entre cuadro y cuadro: «Soy muy inquieta y todo me apetece», comenta entre risas. El público, reconoce, reacciona con sorpresa: «La mayoría me dice que está viendo cosas que no había viso antes. Me alegra presentar algo que, a ojos de las personas, sea una novedad».
Mirando al futuro
Define su obra como «ecléctica, variable y cambiante», y tiene claro que este es solo el principio. Ya piensa en nuevos concursos, futuras exposiciones y próximos proyectos: «En ningún momento me planteo dejar de crear, porque no puedes, siempre hay ideas».
'Entelequias' puede visitarse en el Centro Comercial El Tormes hasta el 30 de noviembre.
