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Una diputada del PP por Salamanca está directamente implicada en el revuelo que ha causado la tramitación de una ley que beneficia a presos etarras con la rebaja de condenas por la aplicación de una normativa sobre intercambio europeo de antecedentes penales que puede beneficiar a presos de ETA. Desde el partido insisten en que no van a tomar medidas con los diputados que formaban parte de la ponencia que tuvo que revistar el texto y que, formalmente, dijeron que lo habían estudiado «con todo detenimiento».
No obstante, en el seno del grupo parlamentario existe malestar con la situación y se piden dimisiones; según varias fuentes, los implicados habrían puesto a disposición sus cargos en una reunión con el portavoz del grupo parlamentario, Miguel Tellado, pero el partido ha optado por asumir el error y colectivizarlo.
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Una de ellas es María Jesús Moro, diputada popular por Salamanca, veterana política y asignada a estas tareas en el grupo del Congreso. Ella formaba parte, junto con Rafael Benigno Belmonte Gómez y José Manuel Velasco Retamosa, de la ponencia que aprobó en primera instancia en el Congreso la reforma que, como ahora ha trascendido, conlleva rebajas de penas a presos de ETA. Al avalarla, acabó con todo el grupo -el mayoritario de la Cámara- avalándola sin en realidad pretenderlo en el pleno del 18 de septiembre y ahora que se saben las consecuencias ha provocado una tormenta política.
Rafael Benigno Belmonte Gómez, María Jesús Moro y José Manuel Velasco Retamosa participaron y firmaron que habían «estudiado con todo detenimiento dicha iniciativa, así como las enmiendas presentadas», tal y como figura en el acta de la ponencia que rubricaron todos los presentes.
Eso prueba que los populares sí tuvieron oportunidad de leer las modificaciones que la norma incluía, pero sin percatarse de que la consecuencia última era acortar las penas a terroristas. La situación de los tres parlamentarios y del partido ha quedado en entredicho tras lo acontecido, porque votaron a favor inicialmente para luego parar el trámite y a pesar de que la iniciativa hubiese salido de todas formas adelante por la mayoría de PSOE y sus aliados.
El PP ha hecho lo único que podía, utilizar su mayoría absoluta en el Senado para, al menos, posponer los plazos, suspender la votación prevista este lunes y escenificar su disposición a enmendar el patinazo en lo posible.
Desde Génova se ha optado por «colectivizar» la responsabilidad y asumirla como partido. Fuentes del PP han señalado que Tellado reunió este martes en torno a las 9.00 horas a los diputados del Grupo Popular que participaron en el trámite parlamentario y allí constató que estaban «muy afectados».
«Los participantes han manifestado su disgusto personal y han asumido su responsabilidad», han indicado las fuentes consultadas, que han insistido en que el PP no va a «señalar a nadie» porque asumen que todos han «fallado» en el trámite parlamentario. Según otras fuentes, los tres habrían puesto su cargo a disposición.
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