El futuro de las dos residencias para menores de Salamanca donde se confunden desamparados y migrantes
La proximidad del nuevo centro de acogida de menores, a 200 metros de unas instalaciones donde se quería alojar a migrantes, genera malentendidos entre uno que se está construyendo y otro que parece descartado
Separados por menos de 200 metros, dos centros de menores, uno en construcción y otro que pudo ser, están generando cierta confusión. No son pocos los que equivocan una con la otra y emiten juicios en contra de 'la de menas' pensando que es la que se está levantando en Puente Ladrillo. Justo cuando el Gobierno acaba de aprobar el reparto de menores llegados a Canarias en la última oleada.
Desde hace meses están en marchas las obras del que sí se va a hacer, destinado a menores desamparados y gestionada por la Junta, mientras las instalaciones que iban a albergar una residencia para acogida de inmigrantes llegados a las costas canarias languidecen sin uso.
La confusión reside en que se trata de dos residencias para alojar menores sin familia, aunque en situaciones muy diferentes y de dependencia administrativa distinta.
Una, la de menores desamparados, está pensada para jóvenes de 8-17 años que están tutelados por la Junta por diversas situaciones familiares. Otra, la que se proyectaba y que ha quedado parada, tendría hasta 450 plazas para acoger migrantes menores de la última oleada que ha recibido Canarias, y que se han empezado a repartir por las comunidades en un proceso polémico y que varias comunidades han denunciado.
Y ambas están muy cerca de una avenida en barrio de Puente Ladrillo que se ha revitalizado con la construcción de una residencia de mayores, la de menores, la reforma de un conocido supermercado o la llegada de una sede dedicada a la investigación.
La nueva residencia de menores
La nueva residencia Los Molinos en la calle Santiago Madrigal sustituirá a la actual cuando, a finales de 2025, esté finalizada. El edificio se está construyendo en la actualidad en una parcela de 4.800 m2 que fue cedida en su día por el Ayuntamiento de Salamanca.
El proyecto lo promueve la Junta de Castilla y León y tiene un coste de 5,5 millones de euros, a los que hay que sumar otros 450.000 para el mobiliario y equipamiento. Está previsto que empiece a funcionar a comienzos del año que viene. Tiene capacidad para 32 menores de entre 8 y 17 años y está destinada a menores tutelados por la Administración autonómica.
Se trata, en concreto, de una residencia de protección de menores de la red de Servicios Sociales de la Junta. Estas residencias ofrecen alojamiento, manutención y apoyo integral para menores sin un entorno familiar adecuado, garantizando su acceso a la educación y servicios necesarios.
El pasado año, la Junta tuteló a 1.776 menores. De los 1.489 acogimientos que se produjeron, más de la mitad, 748, se dieron en una familia. En la actualidad, 903 menores protegidos y tutelados residen en los 81 centros existentes en Castilla y León, de los cuales 107 están repartidos en los diez centros de Salamanca. Mientras, el número total de niños y jóvenes que se encuentran en acogimiento familiar es de 624, 43 en Salamanca, y 122 en guarda con fines de adopción, ocho en territorio salmantino.
La residencia de 'menas' que no se ha hecho
En cuanto a la 'otra' residencia de menores, no se trata más que de un proyecto que ha quedado parado. El edificio en cuestión es el mismo que acogió durante años las actividades de la residencia de mayores San Juan de Sahagún.
A comienzos de este año, el Ayuntamiento de Salamanca denunció que el Estado había pedido permiso para hacer unas obras y adecuar el gigantesco edificio como albergue para migrantes, como parte de las instalaciones repartidas por toda España para recibir la última ola migratoria de Canarias, muchos de ellos, menores no acompañados, los conocidos como 'menas'. Iba a tener cerca de 450 plazas y las informaciones sobre el proyecto generaron controversia social y política.
Se trata de una construcción de 1966 de enorme tamaño; el edificio tiene cerca de 7.500 m2 dentro de una parcela de más de 26.000. Durante años acogió a mayores en plazas ofertadas por la Junta de Castilla y León, que era la que lo gestionaba. La administración regional recordó que este tipo de centros de acogida no pueden tener más de 120 plazas.
Cuando se ha terminado la nueva residencia con el mismo nombre, y que está pegada a la futura residencia de menores de la Junta en la calle Santiago Madrigal, el edificio de la carretera de Aldealengua quedó vacío y revertió al Estado, que era su titular. Hoy por hoy, no hay planes para la conversión en albergue de migrantes.
