El grupo scout de Salamanca que rinde homenaje a una constelación cumple 50 años
Dos de los monitores de Pléyades nos cuentan lo que significa pertenecer al movimiento escultista y cómo celebran estos años de aventura
Hace 50 años surgió en Salamanca un movimiento católico fundado por un grupo de monjas del colegio San Juan Bosco. En aquel entonces, se llamaba Águilas y estaba formado solo por chicas. Con los años, se hizo mixto y empezó a llamarse Pléyades en honor a una constelación con forma de pañoleta, instrumento característico del escultismo y el conjunto adquirió los colores azul del cielo y amarillo de la luz de las estrellas.
El movimiento gira en torno a los valores del escultismo que fundó Baden Powell en 1907. Se centran en el respeto, la amistad, la lealtad y la generosidad, entre otros, por medio de compartir actividades en grupo y en contacto con la naturaleza.
«Educamos niños que comparten ilusiones y crean recuerdos alrededor de 7 estrellas que les guían desde pequeños»
Raquel y Hugo llevan muchos años en Pléyades. Raquel comenzó a los siete y ahora, ya como monitora, cumple trece. Por su parte, Hugo lleva ya siete años formando parte del grupo. Desde siempre, ambos han tenido las ganas y el sentimiento de querer formar parte y poco a poco han ido forjando más su conexión con el movimiento. Para ellos, pertenecer a scout es una enseñanza de vida porque aprenden muchos valores de vida desde muy pequeños como respetar al otro y «el día que tengamos que dejar el grupo, siempre lo llevaremos en el corazón», afirman.
Como monitora de la rama Manada, la función principal de Raquel es inculcar a los niños respeto, amistad, diversión, trabajo en grupo y autosuficiencia. Al llevar a niños pequeños realiza actividades más movidas, dinámicas y con más frecuencia. Sin embargo, en la rama más grande, Rovers, Hugo cuenta que se enfocan más en la vida adulta, las responsabilidades de hacerse mayor y afrontar esta nueva etapa.
Ambos encuentran gran diferencia entre ser aprendiz o monitor. «Cuando eres niño tienes a ilusión de hacer las actividades con tus amigos y vas sólo los sábados» pero afirman que, como monitores, tienen que reunirse todas las semanas para preparar las actividades y esto implica tener más responsabilidad para llevar al grupo.
«Todo esto lo hacemos por amor al movimiento, sin esperar nada a cambio»
Por su 50 aniversario ya han realizado diferentes actividades como un mural humano entre todos junto al monolito de Salamanca, que hace honor al escultismo, formando un 50 y ejercicios para que los niños conozcan la historia de Pléyades. También celebraron un día especial junto a los padres para que descubran más de cerca el grupo.