Mañueco presume de gestión y apoyo al campo «frente al desprecio y olvido» de otros

Salamaq 24 ya esta en marcha tras la inauguración oficial de la feria agropecuaria salmantina a cargo del presidente de la Junta de Castilla y León, que pesa a la ausencia del ministro del ramo tras no ser invitado por la Diputación, no desaprovechó la ocasión para enviar un recado al Gobierno central.

Alfonso Fernández Mañueco, presumió de la gestión de la Junta y su apoyo al mundo rural frente «al abandono, los desprecios y los olvidos del Gobierno central», reiterando que siempre que las cosas se ponen difíciles «la Junta responde». Además, recordó la crítica que realizó en la inauguración de Salamaq el pasado año, a la gestión de algunos problemas del sector llevada a cabo del Ministerio de Agricultura delante del mismo Planas, ministro del ramo. «Algunos no estaban presentes para oírme el año pasado, defender al sector y a Castilla y León. Otros han preferido abandonar sus compromisos, mirar hacia otro lado y olvidarse de la agricultura y de la ganadería», según denunció, sin que quedase muy claro que se refería al ministro, que en esta ocasión no fue invitado al acto, o al anterior consejero de Agricultura, Gerardo Dueñas, que abandonó el cargo tras la crisis entre el PP y Vox en el ejecutivo regional.

Como ejemplo de la buena gestión de la para ayudar el mundo rural a superar las dificultades que está viviendo Mañueco anunció que el Gobierno autonómico seguirá otorgando ayudas a las explotaciones afectadas por la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) durante este año, que «serán concedidas de acuerdo con el protocolo establecido». Además, avanzó que el Ejecutivo autonómico destinará diez millones de euros complementarios para las explotaciones que en 2023 no pudieron acogerse a dichas ayudas, «frente a la actitud del Gobierno, cuyas ayudas seguimos esperando».

Además, durante su intervención, el presidente del Ejecutivo autonómico exigió al Ministerio de Agricultura que «cumpla su compromiso con el Plan del Ovino y las ayudas pendientes», y advirtió que, de no ser así, la Junta de Castilla y León implementará medidas, contando para ello con la participación del sector.

Fernández Mañueco sostuvo que estas iniciativas es «un ejemplo más» del compromiso que mantiene el Gobierno de Castilla y León con la agricultura y la ganadería de la Comunidad, un «sector estratégico» al que este año destina más de 1.500 millones de euros, lo que representa el once por ciento del presupuesto. Todo ello, «a través del diálogo» para llegar a acuerdos con las organizaciones profesionales agrarias, Urcacyl y otros representantes del sector, según mencionó.

Por otro lado, recordó que la Junta de Castilla y León ha otorgado 145 millones de euros de fondos propios en ayudas para la sequía, «la mayor aportación de todas las comunidades autónomas» y, además, es «la administración más ágil» gestionando los fondos de la PAC, con el compromiso de anticipar el 70 por ciento de las ayudas del primer pilar el 16 de octubre y el 90 por ciento antes de que finalice 2024; en ambos casos, el máximo permitido.

En el plano fiscal, como parte de las nuevas bajadas de impuestos que acompañarán a los presupuestos de la Comunidad para 2025, la Junta, ampliará la eliminación del impuesto de sucesiones y donaciones por transmisión de explotaciones agrarias hasta familiares de cuarto grado y empleados que hayan trabajado en ellas al menos tres años.

Por otra parte, el presidente recordó que la Junta también apuesta por el relevo generacional en el campo, con una inversión este año de 67,5 millones para la incorporación de jóvenes y la modernización de explotaciones. Además, está integrando «las mejores tecnologías», tanto al campo como a la industria de transformación, y «reforzando las figuras de calidad». Asimismo, la Junta resolvió «las mayores ayudas de la historia a la industria agroalimentaria» y hasta el 30 de septiembre continúa abierta una convocatoria por 70 millones de euros.

En este sentido, Fernández Mañueco destacó las oportunidades que el campo genera, a nivel de riqueza y empleo como «motor de la vida en el medio rural» y que, además, «garantiza la producción y el abastecimiento de alimentos» que la ciudadanía necesita. «Los alimentos de Castilla y León son sinónimo de calidad. Somos líderes en el sector del vacuno de carne, en ovino, en ibérico, en cereales, en patatas, en azúcar, y en otras muchas explotaciones y producciones como los vinos de calidad, por ejemplo», enumeró.

Algo que se refleja en las exportaciones agroalimentarias que, según subrayó el presidente, en el último lustro se han incrementado un 45 por ciento, ocho puntos más que la media española hasta alcanzar la cifra «récord» de 3.369 millones de euros en el año 2023. «Es un éxito conseguido por todos, a pesar de las muchas y variadas dificultades y las circunstancias que han sido muy duras en los últimos años», señaló.

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