Las obras de un edificio catalogado de Salamanca que ponen el foco en un rótulo único en su tipo
Arranca la reforma del edificio racionalista que albergó durante años la Perfumería Venus y que es el primer caso en el que se ha recomendado conservar el antiguo rótulo del comercio
La conversión de edificios protegidos en nuevos negocios turísticos no tiene freno en el centro de Salamanca y afecta ahora mismo a dos antiguos comercios que comparten una misma características: sendos rótulos valiosos.
La última obra en comenzar es la de la perfumería Venus, cerrada hace ya unos años y que tiene aprobado un proyecto y licencias para convertirse en nueve apartamentos turísticos, una de las vertientes más repetidas de la conversión de inmuebles de arquitectura valiosa a negocios más rentables, como es el caso del alojamiento.
Las obras arrancaron hace un par de semanas con el vaciado de parte del interior de la tienda y desde el viernes pasado la empresa encargada de la reforma ha vallado el exterior, lo que ha obligado a pintar varios pasos de peatones provisionales porque la perimetración ocupa parte de las aceras.
A partir de ahí, arrancan unas obras que convertirán este edificio en apartamentos. Se trata de una construcción fechada en 1918, de influencia racionalista y cuya propiedad, privada, lleva años tramitando un proyecto de rehabilitación y ampliación (se remonta a 2019).
Sus características más interesantes son la fachada, terminada en revoco pintado y ladrillo, con rejerías metálicas y sencillos elementos decorativos combinados con el color exterior. La presencia de este tipo de edificios clásicos en el centro histórico es cada vez menor, de ahí su intéres. Que en este caso se refuerza con la presencia de un elemento único en su tipología, el rótulo del comercio.
Un rótulo protegido
Se trata, por tanto, de una construcción catalogada que durantes años albergó la perfumería Venus. El negocio ya cerró y al cambiar el edificio, ha surgido la duda de qué hacer con un elemento muy característico: el rótulo exterior de la tienda.
En concreto, el afectado es uno con forma de concha marina colocado en banderola en la esquina, visible tanto desde Correhuela como desde Pozo Amarillo. Es uno de los pocos de la ciudad que se consideran susceptibles de ser conservados.

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Es una situación similar a la del edificio de Feldy, junto a la Plaza Mayor, que también está en obras para rehabilitación y convertirse en apartamentos, y que también tiene recomendado conservar el rótulo.
En ambos casos, la ordenanza de rótulo recoge qué es lo que hay que hacer. En caso de no contar con el consentimiento de los titulares de los nuevos establecimientos para el mantenimiento de estos elementos en sus ubicaciones originales, podrá exigirse su desmontaje, con retirada y depósito en dependencias municipales para que se conserven, pero también la opción de que sean cedidos al Ayuntamiento.
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