Hermano Mayor de la Cofradía de la Oración en el Huerto de los Olivos

Semana Santa de Salamanca

«La principal novedad que podemos presentar es ir todos un poco unidos y en concordancia»

Al inicio de la década de los 50 del siglo pasado, en una Semana Santa de gremios y oficios, los hortelanos sacarían a las calles de Salamanca el pasaje de la Pasión que les toca más de cerca: la oración en el huerto de los olivos. Ese es el origen de la Cofradía de la Oración en el Huerto de los Olivos, cofradía de vinculación carmelita, estando su sede canónica en la iglesia del Carmen de Abajo. Lejos quedaron ya los años de la Vera Cruz y de abrir la Procesión General del Santo Entierro, un baúl que parece querer abrirse de nuevo, pero adaptado a los nuevos tiempos y caminos que decidieron emprender las cuatro cofradías y congregaciones de la tarde del viernes. La Oración en el Huerto encontró su propio lugar en el Viernes Santo al cambiar su recorrido, desfilando a los pies de la muralla y subiendo por la calle Tentenecio, dándose la curiosidad de que el Huerto de los Olivos pase debajo del Huerto de Calixto y Melibea y suba al casco histórico salmantino por la calle a la que dio nombre y fama San Juan de Sahagún, patrón de la ciudad. De esa manera, como buenos hortelanos, saben enraizase en la tradición y leyenda salmantinas.

Los hermanos carmelitas acaban de abrir las puertas de la iglesia del Carmen de Abajo. En el lateral de la iglesia donde se encuentra enmarcado el grupo escultórico de la Oración en el Huerto de los Olivos encontramos a Primitivo Moya, Hermano Mayor, que afronta este año esperando cambiar el miedo por la alegría: «El año pasado muchos hermanos todavía tenían muchas reticencias por miedo a los contagios. Veníamos de donde veníamos y la gente estaba reticente para salir. Yo espero que este año ya no haya ninguna reticencia, podamos ir desfilando con alegría, sin comernos mucho la cabeza. Ya sabemos que lo que ha pasado es muy grave, pero esto hay que irlo superando poco a poco, a golpe de pico y pala. Sobre todo, el balance que hago, y que yo veo, que la gente tenga ilusión por volver otra vez a la normalidad de no tener miedo de salir a la calle y juntarse con gente, tanto para salir en las procesiones como para verlas».

Este año la cofradía presenta pocas novedades, más allá del recorrido conjunto de las cuatro cofradías y congregaciones de la tarde del Viernes Santo ya anunciado: «La principal novedad que podemos presentar es la intención de que vayamos todos un poco unidos y en concordancia. Sacaremos una naveta nueva que hemos adquirido. El año pasado adquirimos un incensario y este año la naveta (no tenemos dinero para comprarlo todo de golpe). Lo demás, intentar que los hermanos ya vayan desfilando con el escudo nuevo y hemos presentado los estatutos modificados, que llevamos muchísimos años sin modificarlos».

Una de las grandes dudas que hay en Salamanca es si el Huerto, al salir por separado, debería de cambiar de día. Primitivo nos da su visión al respecto: «Es una de las grandes incógnitas que tenemos en Salamanca. Nosotros desfilamos el Viernes Santo porque por tradición salíamos con la Vera Cruz y hemos seguido manteniendo esa tradición (la de salir el viernes) porque el Jueves Santo está ocupado. Somos conscientes todo el mundo, todos los creyentes, de que, si el Huerto desfila solo, debería de desfilar en la tarde-noche del jueves. Pero el Jueves Santo también hay un montón de procesiones desfilando, así que tenemos el mismo problema. Y si encima hemos conseguido que se haga un poco la Pasión antigua, los catorce pasos que todos hemos vivido, que podamos vivir toda la Pasión desde la Oración en el Huerto hasta la Dolorosa, que es el último paso que va, pues tampoco desentonamos mucho ahí. Estamos en una incógnita, a ver qué sucede. Es cierto que la Semana Santa salmantina, litúrgicamente, está muy descolocada, lo sabemos todos».

«Recuperaremos poco a poco. Porque esto que vamos a hacer este año es un primer paso para ver cómo nos organizamos. Hay que tener en cuenta que ponemos mucha gente en la calle y ocupamos mucho tramo de procesión. Son catorce pasos y somos muchos nazarenos en la calle. Hay que andar con cuidado. Es muy complicado organizar toda esa procesión. Evidentemente, lo del Viernes Santo que había de salir todos de Vera Cruz es impensable. Lo que sí podemos hacer, que es factible, como podremos intentar demostrar este año, es hacer un recorrido donde toda Salamanca vea todos los pasos y no tenga que ir corriendo de un lado a otro como locos. Yo creo que la opción que se ha dado este año es una opción muy válida, una solución bastante acorde. Creo que las cuatro cofradías y el presidente de la Junta de Semana Santa están de acuerdo en que los pasos van por ahí. ¿Qué no vamos a ir este año colocados? Hay que dar tiempo al tiempo».

Desde el Carmen de Abajo miran con satisfacción el estado de la Semana Santa de Salamanca: «La veo con bastante salud. Tenemos altas todos. Unas cofradías atraen más gente que nosotros, por ejemplo, pero nosotros todos los años vamos teniendo altas. Mientras que el número de mis hermanos, que ahora andamos cerca de los 320, no merme considerablemente, pues me siento muy satisfecho, dado el carisma que hay en la calle, la anti Iglesia o anticristianismo que hay en la calle. El mayor hándicap que tenemos todas las cofradías es lo de siempre, que es atraer a gente joven. Pero yo no me puedo quejar. Tengo muchos niños y muchos se mantienen bastante en la cofradía. Somos muchas familias y los niños siguen estando con sus padres, madres y abuelos».

Por último, Primitivo se decanta por la salud para expresar su deseo para esta Pasión, incluyendo hasta a los fotógrafos: «El mayor deseo es que no tengamos ningún problema ninguna de las dieciocho cofradías. Que podamos hacer nuestras estaciones de penitencia tranquilos, sin sobresaltos, tanto de lluvia como de problemas de salud en la calle, que eso es muy problemático, cuando hay algún desvanecimiento o alguna cosa rara. Y, sobre todo, eso, que salgamos todos con salud, que hagamos nuestra Estación de Penitencia cada uno como mejor la considere oportuna, pero que no haya ningún problema para nadie, ni si quiera para vosotros los fotógrafos, que también estáis expuestos en la calle».

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